Palmar Norte. Jhon Ángel Ramírez Montoya, de nueve años, salió al patio de su casa al oír las gallinas cacarear más de la cuenta. Iba comiéndose un popi, junto a su mascota, un perro llamado Azul.
Según contó su hermana, María Estefany, pocos minutos después Jhon entró y le dijo a su mamá que una ardilla lo había mordido a él y a su can. El animal le quiso quitar el dulce y él no lo dejó. Lo mordió en un dedo de la mano derecha. Esto sucedió el 5 de mayo pasado.
Jhon siguió asistiendo a cuarto grado, en la Escuela Leonor Chinchilla, en Tinoco de Palmar Norte de Osa, donde vivía.
El 4 de julio, el niño enfermó. María Estefany dijo que Jhon se quejaba de dolores debajo de su brazo derecho, por lo que lo llevaron al Hospital Tomás Casas, pero lo enviaron de vuelta a Tinoco.
Pero los síntomas empeoraron: sufría dolores abdominales, vómitos y mareos. Lo internaron en el Tomás Casas y de ahí pasó al Hospital de Golfito. El 7 de julio lo trasladaron grave al Hospital de Niños, donde falleció víctima de la rabia, el miércoles pasado. Azul, su mascota, murió un día antes.