Una niña de diez meses permanece en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) del Hospital Nacional de Niños (HNN) luego de que un accidente en andadera le causó quemaduras serias.
La bebé, de Granadilla de Curridabat, en San José, tiene el 25% de su cuerpo quemado; las zonas más dañadas son tórax y brazos.
Según los médicos del HNN, la menor ingresó a la cocina de su casa en su andadera y chocó contra la estufa, y una olla con líquido caliente se derramó sobre ella.
No es un caso aislado. Solo el año pasado dos menores de dos años estuvieron en condición delicada por eventos parecidos.
“No es el primer caso en donde el uso de andaderas pone en peligro la vida de un menor. Debemos seguir el ejemplo de Canadá y Brasil, que han prohibido las andaderas para proteger a los menores de accidentes graves que pueden llevar a la muerte”, comentó Rodolfo Hernández, director del HNN.
“Hay reportes que relacionan las andaderas con hasta un 30% de lesiones graves y un 3% de las muertes en el primer año de vida”, añadió el médico.