El canciller venezolano, Jorge Arreaza, atacó a Costa Rica por recibir a Luisa Ortega, a quien la Asamblea Nacional Constituyente, instalada por el mandatario Nicolás Maduro, destituyó del cargo de fiscala General de Venezuela.
En criterio de Arreaza, la administración de Luis Guillermo Solís está acatando órdenes de su homólogo estadounidense, Donald Trump.
"(El) Gobierno de Costa Rica opta por arrodillarse ante políticas de Washington, agrediendo la democracia venezolana y sus legítimas instituciones. Lamentamos la arrogancia de la Cancillería de Costa Rica, que parece imitar la conducta supremacista de sus jefes del Norte", escribió Arreaza en su cuenta en Twitter.
El titular de la diplomacia venezolana se molestó por un comunicado de prensa que emitió este lunes la Casa Amarilla, en el cual se afirma que la administración de Solís desconoce la destitución de Ortega y las demás decisiones tomadas por los diputados constituyentes. Así lo informó el Ministerio del Poder Popular para las Relaciones Exteriores de Venezuela, en su sitio Web.
"El Gobierno de la República reconoce a la señora Luisa Ortega, como fiscala general de la Venezuela, siendo que su destitución emana de la Asamblea Nacional Constituyente, órgano que el país no reconoce", señala la nota de prensa costarricense.
Ortega llegó este lunes al país para reunirse con el fiscal general, Jorge Chavarría, en el salón diplomático del aeropuerto Juan Santamaría y, posteriormente, ambos ofrecieron una conferencia de prensa desde la Fiscalía General.
Allí, ella dijo, entre otras cosas, que presentará una denuncia por amenazas a su vida, en contra del gobierno de Nicolás Maduro, tanto en el Ministerio Público de Costa Rica como en la Corte Interamericana de Derechos Humanos, con sede en San José.
En específico aseguró que no puede regresar a Venezuela porque sería víctima de encarcelamiento, tortura y desaparición. Al tiempo que dijo tener pruebas de serios casos de corrupción por parte de funcionarios de Maduro y miembros de la Asamblea Constituyente instalada por él.
El canciller costarricense, Manuel González, se manifestó extrañado por las declaraciones de su homólogo en Caracas y defendió que prive la democracia y la separación de poderes, tal y como ocurre en Costa Rica.
"Estoy un poco extrañado de la reacción del gobierno de Venezuela al decir que nosotros agredimos su democracia y sus instituciones, es un poco agredir algo que no existe, que cada vez desaparece de la vista de todos los que queremos una Latinoamérica que viva en paz y que viva en democracia. Dichosamente Costa Rica, con todos sus defectos y también con todas sus virtudes, ha podido transitar por el camino de la democracia, defendiendo sus principios, sus valores, respetando la separación de poderes, respetando la decisión popular, admitiendo observadores internacionales en todos sus procesos electorales, no solo admitiéndolos, sino promoviendo que nos visiten, y eso aparentemente es lo que echa de menos el gobierno de Venezuela.
"Lo que si puedo decir es que siempre estaremos en la mejor disposición de darle nuestra mano al pueblo venezolano y de ayudar al reestablecimiento de la democracia y la institucionalidad en ese país y en cualquier país que quiera respetar los derechos humanos y las libertades fundamentales de su pueblo", declaró.