La presidenta de la Asamblea Legislativa, la liberacionista Silvia Hernández, calificó de censurable la decisión que tomó el Congreso de El Salvador, en un lapso de dos horas, de destituir a los magistrados propietarios y suplentes de la Sala de lo Constitucional, así como al fiscal general en ese país.
En declaraciones a La Nación, la diputada del Partido Liberación Nacional (PLN) enfatizó que ese manejo arbitrario, promovido por el presidente salvadoreño, Nayib Bukele, es censurable y añadió que es muy delicado para el sistema de pesos y contrapesos propios de un sistema democrático.
Hernández explicó que Costa Rica puede promover espacios de diálogo y negociación, desde mecanismos existentes, sobre la necesidad de proteger el sistema democrático en tierra salvadoreña.
Específicamente, la liberacionista citó que el país sostiene actualmente la presidencia pro témpore del Sistema de Integración Centroamericano (SICA), espacio “donde el tema debería estarse discutiendo ampliamente”.
“Deberíamos tener cercanía con actores como IDEA Internacional (Instituto Internacional para la Democracia y la Asistencia Electoral, cuyo secretario general es el ex vicepresidente Kevin Casas), para tomar un criterio fundamentado de una organización que se dedica a eso, a proteger la democracia”, consideró Hernández.
Incluso, la jerarca del Directorio legislativo manifestó que Costa Rica debería llevar la discusión ante la Organización de Estados Americanos (OEA), para resolver las amenazas salvadoreñas a la democracia a través del diálogo.
“No veo que la Asamblea (costarricense) deje de manifestarse, me parece prudente. Ya varias fracciones legislativas lo han hecho. El PLN lo hizo como partido y como fracción. Todas las instancias que puedan llamar a cuidar ese balance de pesos y contrapesos del ejercicio democrático contribuyen a visibilizar una decisión que, desde mi punto de vista, es arbitraria”, comentó.
Ya anteriormente se habían pronunciado los diputados costarricenses para condenar actos del gobierno de Bukele, como en febrero del 2020, cuando 38 congresistas votaron dos mociones para censurar el ingreso del mandatario salvadoreño a la Asamblea Legislativa de su país con militares armados.
En esa ocasión, votaron en contra de las mociones cuatro miembros del bloque fabricista Nueva República: Carmen Chan, Nidia Céspedes, Ignacio Alpízar y Marolin Azofeifa. Esa vez, la Sala de lo Constitucional salvadoreña, hoy destituida, le había ordenado a Bukele abstenerse de usar el ejército contra el Congreso.
En febrero pasado, nueve legisladores acudieron a observar las elecciones parlamentarias en ese país centroamericano, invitados directamente por Bukele y financiados por su gobierno.
Para esa visita, el liberacionista Daniel Ulate y el fabricista Jonathan Prendas publicaron, en sus redes sociales, fotografías con el mandatario salvadoreño que hoy impulsa, desde el Congreso, la destitución de los jueces que se le han opuesto a sus decisiones.