Pocos diputados irrespetaron el protocolo del 1.° de mayo

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San José (Redacción). Este año, buena parte de los diputados se despojaron de la extravagancia  y acudieron a la Asamblea Legislativa vestidos de forma sobria.

No faltaron, sin embargo, quienes contrariaron el protocolo, el cual estipulaba que las damas debían asistir con traje sastre negro y los caballeros con traje sastre en colores gris o negro y corbatas en gris o plateado.

Aun así, con todo y la extravagancia de algunos, el exceso de maquillaje de otras y la negativa de uno que otro legislador a ponerse corbata, el balance fue sobrio y positivo, estimó Karla Granados, jefa de protocolo de la Asamblea Legislativa.

Para Granados, este fue uno de los años en los que más se ha respetado la etiqueta.

Sin embargo, entre los desaciertos al vestir de la jornada matutina estuvo  el de la diputada del Partido Acción Ciudadana, Yolanda Acuña, quien  se enfundó en un traje gris con vuelos en las solapas que, según Granados, va en contra del protocolo.

En su cabellos, Acuña lució un tocado en forma de sombrero, hecho por su estilista de San Miguel de Santo Domingo de Heredia, según dijo ella, y el cual pecó de extravagane.

Legado autóctono . Carmen Granados, compañera de la nueva jefa de fracción del PAC, también irrespetó el protocolo al lucir un traje  con el que quiso rendirle un tributo a la comunidad indígena del país, y que fue elaborado por el diseñador nacional Álvaro Núñez.

De ella, la jefa de protocolo criticó el lucir unas hombreras muy altas, un zíper muy expuesto para la ocasión y un escote en forma de V, el cual le quitó elegancia al atuendo.

Granados, quien incluso se tomó el tiempo para emitir un comunicado de prensa con los detalles de su vestido, dijo a La Nación que planea seguir utilizando este tipo de vestimenta, con el que se destaca el trabajo de los índigenas del país, uno de los grupos poblacionales por los cuales ha luchado más desde su curul, según considera.

Sobre su atuendo, el crítico de moda Roberto Lobo expresó: "A doña Carmen que la devuelvan. Es que su vestido simplemente no cumple con lo estipulado. Además, tampoco es que este sea un diseño moderno o muy distinguido como para que valga la pena romper todo el protocolo con tal de lucirlo".

Entre los legisladores mejores vestidos estuvieron Gloria Bejarano, de la Unidad Social Cristiana, quien portó un traje sastre negro y Carlos Góngora, del Movimiento Libertario. Él vistió de gris.

A Bejarano, Roberto Lobo le alabó su elección al vestir. "Así es como se deben hacer las cosas, un traje de muy buen diseno, con un talle justo y además el cinturón la hace verse mas estilizada y femenina. Accesorios dorados, del tamaño correcto y el bolso sencillo, pero con el toque elegante de la cadenilla que pareciera Chanel. Ella no  necesita de mucho  para llamar la atención de manera positiva.

En el buen gusto de los accesorios atinó su esposo, el expresidente Rafael Ángel Calderón, quien le regaló el dije y la cadena hace 34 años, durante un viaje que hicieron a Colombia.

Sobre el traje, Bejarano manifestó que lo adquirió en un viaje que hizo a  Estambul meses atrás, y que entre su paseo de mezquita en mezquita sacó un "tiempito" para buscarse el vestido.

Góngora, por su parte, compró su vestuario en Italia. La camisa fue un regalo de su mamá y las mancuernillas se las obsequiaron sus sobrinos, pues el legislador estuvo ayer, lunes, de cumpleaños.