Los nuevos diputados cargarán con la responsabilidad de discutir las reformas al Sistema de Banca para el Desarrollo (SBD), a partir del 1.º de mayo, luego de que las últimas negociaciones para aprobar el proyecto de ley cayeron en un punto muerto.
Así lo explicó ayer la subjefa de la fracción del Partido Liberación Nacional (PLN), Siany Villalobos, tras explicar que la discusión se complicó en los últimos días.
“Teníamos la ilusión de avanzar en el tema, pero al día de hoy lo vemos bastante complicado”, dijo.
La iniciativa lleva cuatro años de trámite en la Asamblea Legislativa. Nació con la intención de modificar la ley original para usar una cantidad importante de dinero en créditos a pequeños emprendedores y hacer operativos otros recursos que hoy no se pueden utilizar.
Según el director ejecutivo del SBD, Miguel Aguiar, el proyecto permitiría emplear un fondo de ¢260 millones para dar préstamos.
Dos semanas atrás, el plenario aprobó la realización de sesiones extraordinarias, tres días a la semana, con el fin de tramitar la reforma legal. La semana pasada, los diputados no llegaron a dos sesiones. La tercera se hizo, pero se suspendió.
Ayer, durante la mañana, faltaron dos parlamentarios para lograr los 38 necesarios para que hubiera cuórum. Eso congeló la discusión sobre las reformas.
La moción que aprobó este Congreso para ver la modificación al SBD, ordena la discusión del proyecto hasta que haya una votación definitiva.
El independiente Luis Fishman impulsó la negociación para cambiar varios puntos del plan, en particular eliminar el impuesto a la banca de maletín (bancos extranjeros que prestan dinero en el país).
Según Fishman, en la última reunión casi se logró un acuerdo. “Solo quedaban tres temas: uno para nombrar al director de la secretaría técnica por concurso y no a dedo, otro sobre las potestades de las cooperativas de autogestión y una moción para eliminar el tributo sobre la banca maletín”, añadió.
El acuerdo para seguir con la negociación ayer era que el director de Tributación, Carlos Vargas, aportara un estudio sobre las utilidades de las entidades que emiten tarjetas de crédito.
La intención es que, al eliminar el tributo del 15% sobre utilidades a los bancos foráneos, se busquen otros fondos para financiar el SBD.
Dificultad. Fishman reclamó que ayer no se presentaran a la mesa de negociación ni el director de Tributación, ni diputados de Acción Ciudadana ni del PLN.
El ministro de Presidencia, Carlos Ricardo Benavides, aseguró anoche que el oficialismo rechaza negociar puntos que, para modificarse, obligarían a devolver el proyecto a una comisión.
“A las diputadas del PLN les parece obvio que los opositores solo quieren regresar el proyecto a comisión para hundirlo”, explicó.