Ningún ministro ni gerente de instituciones autónomas del actual gobierno aspirará a ser diputado en el periodo 2018-2022. El jueves expiró el plazo para que renunciaran los jerarcas interesados en participar en las elecciones y ninguno lo hizo.
Los comicios presidenciales y legislativas de Costa Rica se celebrarán el domingo 4 de febrero de 2018 y, según la Constitución Política, no pueden postularse para el cargo de diputado quienes ejerzan cargos de ministros en los seis meses previos.
Según el Tribunal Supremo de Elecciones (TSE), entonces, estos funcionarios debían renunciar a más tardar el 3 de agosto si planeaban postularse.
El artículo 109 de la Constitución establece también este requisito para magistrados propietarios de la Corte Suprema de Justicia, magistrados propietarios y suplentes del TSE, y el Director del Registro Civil.
El ministro de Comunicaciones, Mauricio Herrera confirmó a La Nación que ningún ministro renunció en el plazo mencionado.
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Asimismo, esta medida aplica para el presidente de la República, los vicepresidentes y hasta parientes en segundo grado de consanguinidad o afinidad de quien ejerza la presidencia de la República.
El Tribunal Supremo de Elecciones establece, en su calendario electoral, que en ningún caso las renuncias podrán regir con posterioridad a esa fecha (3 de agosto).
La alternativa de postularse como candidato a diputado todavía queda abierta para los viceministros, a quienes el artículo 109 no impone esta restricción.
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Sin embargo, para poder postularse deberán renunciar a sus puestos, pues de lo contrario incurrirían en beligerancia política.
En caso de que alguna persona se postulara como candidato sin renunciar, el Tribunal Supremo de Elecciones (TSE) podría sancionarlo con la destitución del cargo e inhabilitaciones, de dos a cuatro años, para ejercer cargos públicos.
A principios de año, sí renunciaron los exministros Carlos Alvarado (Trabajo) y Welmer Ramos (Economía) porque tenían aspiraciones de postularse como candidatos presidenciales y, para hacerlo, debían dimitir un año antes de la contienda. Ambos compitieron en la convención interna de Acción Ciudadana (PAC), en la que ganó el primero.