El presidente, Luis Guillermo Solís, dice que no le agobia que la Procuraduría General de la República califique como inconstitucional el nombramiento el obispo luterano Melvin Jiménez, como ministro de la Presidencia.
Asegura que todavía falta conocer el fallo de la Sala IV sobre la acción de inconstitucionalidad que presentó el abogado Álvaro Orozco contra la designación de Jiménez. Orozco alega que ese nombramiento es contrario a la Constitución Política magna porque el ministro no pertenece al estado seglar y la Procuraduría le dio la razón.
"No quiero especular, sino esperar a que se resuelva. Lo administraremos con tranquilidad, cuando la Sala IV se pronuncie, no nos agobia.Tenemos un caso sólido y lograremos resolverlo favorablemente", manifestó Solís en Guanacaste, donde se encuentra de gira.
El mandatario agregó que no comparte la opinión de la Procuraduría, pero que la respeta: "No es la opinión del Presidente, no es la opinión de la administración, pero es la opinión de esa entidad que se sumará al proceso que está en curso y que puede o no, tener incidencia en lo que resuelva la Sala Constitucional", expreso Solís.
También dijo que este fallo debería generar alegría entre la población, porque refleja la independencia de las autoridades de la administración de justicia.
"La Procuraduría General de la República defiende los intereses del Estado, no los del Gobierno, no los de una administración y desde ese punto de vista se garantiza la absoluta independencia", concluyó el Gobernante.