La esperanza de aprobar el Proyecto de Ley de Gestión Integrada del Recurso Hídrico antes de que finalice el actual periodo legislativo, se evaporó ayer.
Doce diputados firmaron una consulta ante la Sala Constitucional, la cual frenó el avance del plan legislativo por lo menos durante un mes.
Ahora le quedará al nuevo Congreso la votación en segundo debate de dicho proyecto, el cual fue presentado ante el Congreso por medio del mecanismo de la iniciativa popular.
Carmen Muñoz, jefa de la fracción de Acción Ciudadana, dijo tener dudas de que la iniciativa pueda reducir la facultades del Servicio Nacional de Aguas Subterráneas, Riego y Avenamiento (Senara).
“También existe el temor de que se pueda interpretar que en el proyecto de ley hay una reducción de las áreas protegidas alrededor de las cuencas hidrográficas”, manifestó Muñoz.
El argumento de los diputados que consultaron el plan es que quieren corregirlo o blindarlo, para que la ley no se caiga una vez que esté aprobada. El espíritu original de la iniciativa es modernizar la administración de los mantos acuíferos, pues la norma vigente data de 1942.