El exdiputado, Justo Orozco, dice que le perdonará a su partido, Renovación Costarricense, una deuda por ¢103 millones.
Orozco aseguró que no cobrará ese dinero porque la agrupación que él preside, no tiene los recursos suficientes para saldar la deuda y porque no prevé que algún militante haga una donación por ese monto.
“Esos millones ya están gastados, ya no podemos hacer nada, tengo la expectativa de que no me lo van a pagar, no es que me sobra el dinero, pero lo hago para colaborar con la democracia”, afirmó el exdiputado.
La deuda de ¢103 millones consta en el último estado financiero que presentó Renovación Costarricense al Tribunal Supremo de Elecciones (TSE), el pasado 30 de setiembre.
Orozco es el mayor prestamista, a él se le adeuda el 55% de los créditos que la agrupación tiene con 18 militantes, quienes en total le fiaron ¢186 millones.
Entre los otros prestamistas, también sobresalen los dos diputados actuales del partido, Abelino Esquivel que aportó ¢10,7 millones y Gonzalo Ramírez con ¢5 millones.
El exdiputado expresó que la deuda con los militantes está pendiente, porque no se pudo incluir dentro de los gastos que se le cobraron al TSE por concepto de la deuda política, debido a que los ¢461 millones que tenían derecho a cobrar por las últimas elecciones, se usaron para cubrir el pago de otros proveedores.
"Los militantes quedamos de último, la cobija no dio para tanto, los votos que obtuvimos en las elecciones no fueron suficientes para saldar todos los compromisos financieros", expresó quien en dos ocasiones ha ocupado una curul en la Asamblea Legislativa.
Esta sería la segunda vez que Orozco le perdona una deuda a Renovación Costarricense, tampoco cobró ¢22 millones que invirtió en los comicios presidenciales y municipales de 2010.
Gastos ordinarios. Según Justo Orozco los ¢103 millones los prestó durante los últimos cuatro para cubrir gastos ordinarios, principalmente en el pago de alquileres, planilla, seguro social, organización y capacitación.
“Prácticamente soy el único que sostiene el partido, tuve que prestar ese dinero para evitar que el partido cerrara”, explicó el exlegislador.
Él agregó que ese monto no lo desembolsó en un solo tracto, sino periódicamente durante los últimos 48 meses.
“Al mes yo daba ¢2 millones al partido, esa suma me parece razonable, no soy millonario, llevo una vida modesta, es de mi pensión de educador que sacaba el dinero, no de ninguna actividad ilícita”, dijo Orozco.