Se llegó a un acuerdo, pero no es la moción que ustedes presentaron.
Pero es un paso muy importante. A mí me parece que el que sea la Asamblea Nacional del Partido Liberación Nacional la que le hace una excitativa a la Sala Constitucional, para mí, es una iniciativa, es una gestión importante, porque la Asamblea habla de resolver el tema por la vía de fondo, o bien por medio de una medida cautelar.
”Yo estoy satisfecho de que la Asamblea esté optando por este camino”.
Al final, consiguieron una salida política.
Sí. Parecía que estaba agotado el diálogo aquí, dichosamente no fue así, y me parece que es una señal de madurez, para llegar a un acuerdo como este.
¿Mantiene la posición de que es posible una candidatura a la Alcaldía de San José por el Partido Liberación Nacional?
Sí, no lo descarto.
Ahora, esta decisión, bueno, hace que se queme menos Liberación Nacional, tras la hoguera interna. ¿Se enfría un poco la situación?
Sí. Yo creo que esta es una salida buena para el Partido. Se está retomando el diálogo.
”La confrontación que estaba anunciada, era una confrontación que dejaba muy dividido a Liberación”.
¿Por qué retirar la moción anunciada para hoy (ayer)? ¿Sintió que perdió fuerza para ello (suspender el castigo de inhabilitación)?
No, yo atendí al criterio de compañeros que estaban preocupados por las consecuencias, porque independientemente del resultado, ya ganara o perdiera la moción, iba a quedar el Partido muy lastimado.
¿Es real el correo de Julio Rojas (jefe de fracción del PLN) en el que señala que iba a desistir de apoyar su moción?
No lo sé, no lo conozco.
¿Sintió que la fracción tambaleó en algún momento?
No, no. Ellos han estado muy solidarios conmigo y, de hecho, fue un grupo de diputados el que me ayudó a redactar la moción.
Hubo un comunicado de prensa que circuló esta mañana (ayer) en el cual usted renunciaba a pedir apoyo para la moción de quitarle el castigo.
Eso es falso. Aquí ha habido toda clase de manipulaciones. Esa es una más. Es un arma muy innoble.
¿Aún se siente perseguido?
Hubo un linchamiento, por la forma apresurada en la que resolvieron mi caso.