La Fiscalía General sepultó una denuncia por el presunto delito de prevaricato contra el anterior presidente de la Asamblea Legislativa, Henry Mora, en torno al polémico otorgamiento de un puesto en el Congreso a la vicepresidenta del gobernante Partido Acción Ciudadana (PAC), Kattia Martin.
El Ministerio Público solicitó a la Sala III desestimar la queja anónima que se presentó, en noviembre del año pasado, contra Mora, del PAC, y Jorge Rodríguez y Luis Vásquez, de la Unidad Social Cristiana (PUSC), quienes integraron la cúpula legislativa desde mayo del 2014 hasta abril del 2015.
Alegando “motivos de atipicidad”, la Fiscalía determinó que se debía archivar el caso, en el cual se investigaba si los tres legisladores habían dictado una resolución contraria a la ley, o bien, con base en hechos falsos, como dio a conocer este martes Diario Extra .
“Los hechos denunciados no encuadran en la figura de prevaricato, por cuanto no se pudo concluir que los diputados sean funcionarios judiciales o administrativos, como lo requiere el artículo 357 del Código Penal”, señaló el Ministerio Público.
Inicialmente, la denuncia anónima era por el delito de peculado; es decir, por sustraer o desviar fondos públicos. Ante una consulta de La Nación , la Fiscalía argumentó que, tras una investigación inicial, estableció que el delito que eventualmente podría haberse cometido era el de prevaricato. Y, al final, no logró comprobar ninguno de los dos.
La oficina de prensa del Ministerio Público informó de que quedará en manos de la Sala III la decisión de acoger o rechazar la solicitud de desestimación.
A Mora, Rodríguez y Vásquez se les investigaba por autorizar la designación de Martin en la Dirección de Prensa y Protocolo de la Asamblea, utilizando la plaza que dejó vacante un chofer. Ese puesto fue recalificado para un profesional 2B, con lo cual el salario pasó de ¢370.000 (chofer) a ¢1,4 millones mensuales.