Dividido apoyo a Monge

Este artículo es exclusivo para suscriptores (3)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.

Subscribe

Ingrese a su cuenta para continuar disfrutando de nuestro contenido


Este artículo es exclusivo para suscriptores (2)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.

Subscribe

Este artículo es exclusivo para suscriptores (1)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.

Subscribe

Unos lo respaldaron plenamente, otros le brindaron un apoyo parcial y hubo quienes no pudieron encontrar una explicación razonable a sus apreciaciones.

Así fueron las respuestas emitadas ayer por dirigentes gubernamentales, líderes partidarios, empresarios y sindicalistas a las críticas lanzadas hace dos días por el expresidente Luis Alberto Monge contra el gobierno del presidente José María Figueres.

La más evasiva de las posiciones fue la del mismo aludido. El Jefe de Estado aseguró por la tarde en Casa Presidencial -durante una conferencia de prensa para informar sobre la reciente sesión de la Asamblea General de la ONU- que mantiene una excelente relación con Monge; aunque al ser interpelado sobre los motivos que tendría el exgobernante para emitir tales criterios, únicamente se limitó a responder: "No sé."

"La verdad es que yo sólo respeto y admiración puedo tener por don Luis Alberto Monge. Es una persona a la que yo he consultado en varias oportunidades y lo seguiré haciendo", aseguró Figueres poco después de afirmar que siempre ha buscado la oportunidad reunirse con Monge y el sucesor de este, Oscar Arias.

El expresidente Monge, quien dirigió el país en el período 1982-1986, demandó al Poder Ejecutivo la aplicación de un plan social que compense los efectos de la reforma estructural. Además, expresó que mantiene discrepancias y posiciones que no puede conciliar con el Gobierno. Sus declaraciones salieron a la luz solo cinco semanas después que Arias achacó al Poder Ejecutivo la falta de entendimiento durante su primer año.

Voces opuestas

En la cúpula liberacionista se produjo un verdadero abanico de opiniones. Desde el apoyo casi total a las manifestaciones de Monge emitidas por el exdiputado y miembro del Directorio Político Jorge Luis Villanueva, hasta la incomprensión exteriorizada por el subjefe de la fracción parlamentaria oficialista, Roberto Obando.

"La verdad es que los muchachos que gobiernan en un alto porcentaje no son de Liberación Nacional, sino de organizaciones anexas al partido. Todos queremos colaborar, pero el Gobierno ya escogió a sus colaboradores y a los demás nos están acorralando", destacó Villanueva al resaltar la afirmación de Monge de que el Gobierno no quería su consejo.

Obando dijo que no entendía las razones que tuvo el exgobernante para lanzar sus críticas por cuanto, a su juicio, Figueres ha mantenido reiterados contactos con Monge en los últimos meses y le ha solicitado sus consejos.

Otros dirigentes, como el exministro de Obras Públicas Guillermo Constenla y el exprecandidato verdiblanco José Miguel Corrales compartieron parcialmente la posición de Monge, y la justificaron al explicar que el PLN y el Gobierno están controlados, actualmente, por corrientes que no representan el verdadero sentir de la agrupación.

Al margen de la arena política, líderes empresariales y sindicales -como Carlos Alvarado, presidente de la Unión de Cámaras, y José Joaquín Meléndez de la Confederación de Trabajadores Rérum Novárum- hicieron eco de las declaraciones de Monge y resaltaron que el país atraviesa una fuerte crisis económica que demanda acciones concretas del Gobierno.

Ayer se intentó localizar a Monge para que especificara algunos de los conceptos expresados en sus declaraciones, pero, aunque se le llamó reiteradamente y se le envió un fax con varias preguntas, no fue posible obtener respuesta. Tampoco fue posible contactar a Arias y a su esposa, la exprecandidata Margarita Penón, para que se refirieran al asunto.