La Comisión de Honores de la Asamblea Legislativa dictaminó a favor este miércoles, de forma unánime, el proyecto de ley que busca declarar a Carmen Granados Soto como benemérita de las artes patrias. Para que se oficialice el benemeritazgo de la destacada folclorista, humorista, locutora, compositora y artista nacional, el plan deberá ser ratificado en el plenario.
Geison Valverde Méndez, diputado del Partido Liberación Nacional (PLN) y proponente de la iniciativa, señaló que Carmen Granados fue una mujer “entregada a la preservación y exaltación de la cultura popular costarricense”. Según el legislador, la desaparición de su generación también representa la extinción de la escuela folclorista y humorística nacional.
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Carmen Granados, cuyo retrato figura en la Galería de los Artistas Nacionales, falleció en San José en 1999, a pocos días de cumplir 84 años. Se le reconoce por su labor artística de más de 65 años en estaciones radiofónicas como Nueva Alma Tica, La Voz de la Víctor, Monumental, Columbia y radio Fides.
Su personaje más popular fue “Rafela”, una campesina que se dio a conocer enradio City. Continuó sorprendiendo al público con los personajes de “Leopoldina”, una alumna que aparecía en el programa La niña Pochita y “Doña Vina”, la mujer que estaba al tanto de todos los acontecimientos en el país.
Carmen Granados rescató el “choteo” a lo largo de su trayectoria profesional, una de las características predominantes de la identidad nacional. Logró infundir alegría en el pueblo con su personalidad campesina, al utilizar de forma recurrente los costarriqueñismos.
Aparte de su desempeño como locutora y humorista, también rindió homenaje a otras personalidades costarricenses, festejos populares y hechos históricos en sus composiciones musicales. Grabó más de 15 canciones interpretadas por artistas como Gilberto Hernández, Jorge Duarte, Ray Tico, Otto Vargas, Lencho Salazar y Ronald Alfaro.
Dentro de los reconocimientos que Granados recibió, se incluye el premio “Huella de Oro” de la Asociación de Artes y Tradiciones Populares, así como una medalla de oro otorgada por la Presidencia de la República durante el mandato de Rodrigo Carazo Odio, en 1979. También fue declarada hija predilecta del cantón de San José.