El diputado socialcristiano Pedro Muñoz condiciona su apoyo a la reforma fiscal a que el Gobierno garantice que el nuevo mecanismo adoptado por el Instituto Nacional de Seguros (INS), para indemnizar a los dueños de carros accidentados, no fomentará la evasión fiscal.

Muñoz teme que ni el INS ni el Ministerio de Hacienda estén blindados contra una eventual evasión en la compra directa de repuestos y de mano de obra por parte del asegurado, una de las características principales del esquema implementado a partir del 1.° de julio pasado.

No obstante, el Ministerio de Hacienda descartó el peligro y el INS calificó de absurdos los argumentos del congresista.

El socialcristiano alega que el nuevo modelo entrega al asegurado el dinero para la compra de refacciones, lo cual en su criterio incentivará el mercado negro de repuestos y la baja en declaraciones de renta de los talleres. El INS estima en unos ¢65.000 millones anuales el mercado de repuestos y reparaciones de carros.

Este medio varios intentos por obtener una reacción del Ministerio de la Presidencia, enlace entre el Poder Ejecutivo y el Congreso, sobre la posición del congresista, pero no se obtuvo respuesta.

“Mi voto a favor de la reforma fiscal va a depender de que el Gobierno opte por una serie de medidas para reactivar la economía y para reducir la evasión fiscal y claro, por supuesto, que este asunto del INS está metido en ese paquete. Al final yo veré si recibí o no las seguridades necesarias para votar a favor (del paquete de impuestos)”, señaló el diputado socialcristiano a este diario.

Desde el 2 de julio pasado, Muñóz envió un oficio a la ministra de Hacienda, Rocío Aguilar, en el que asegura que el nuevo modelo para indemnizar a los dueños de vehículos implica que el INS entregará, “sin mediar factura o control”, el dinero en efectivo para compren directamente los respuestos, en razón de que el nuevo modelo elimina la red de talleres autorizados por la entidad para la reparación.

“Señora ministra, considero que es importante recordar que el INS anualmente paga por indemnización de siniestro de vehículos la suma aproximada de ¢65.000 millones (...) de ahí la preocupación del suscrito, por cuanto con dicha política (nuevo esquema de indemnización) se fomentará la informalidad y la compra de repuestos en el mercado negro (...) aumentando la evasión fiscal”, recalcó el diputado, quien consultó a Hacienda si hubo algún estudio técnico de esa cartera o del INS sobre el eventual impacto fiscal de la medida.

El INS modificó por completo el esquema que rigió durante los últimos 26 años para reparar los carros accidentados. En el pasado, el Instituto era el que adquiría los repuestos y pagaba los servicios de mano de obra de los talleres contra factura.

El diputado dijo a este diario que, por esas dudas, no dará su voto a favor de la reforma tributaria si el Gobierno no le garantiza antes que está cubierto contra cualquier amenaza de evasión fiscal valiéndose de la compra de repuestos y reparación de vehículos asegurados.

INS y Hacienda descartan evasión

A pesar de los temores expresados por el diputado Pedro Muñoz, Hacienda afirmó que no ve riesgos en el nuevo modelo de indemnizaciones, pero señaló que esperará a que el mercado se acomode para determinar si hacen falta acciones para evitar una caída en la recaudación de impuestos por la venta de repuestos y reparación de carros.

La semana pasada, Nogui Acosta, viceministro de Ingresos de Hacienda, dijo que, desde el punto de vista de su cartera, no se prevé ningún impacto en la recaudación.

“Que el INS pague directamente al asegurado o a los talleres no debería tener ningún problema (en materia de recaudación de impuestos) porque todos los que reparamos un vehículo esperamos tener alguna factura para todos los efectos”, afirmó.

Para Acosta, es ilógico pensar que el dueño de un vehículo accidentado optaría por comprar los repuestos más baratos que encuentre en el mercado con tal de ahorrarse unos colones en la reparación, por lo que Hacienda respira sin preocupaciones por ahora con el cambio que ejecutó el INS.

“Normalmente un seguro se adquiere para que a uno lo dejen en la misma condición. Si tenés tu casa asegurada y ocurre un siniestro, la idea es que vos tengás tu casa en las mismas condiciones en que la tenías antes; no se gana con el seguro (...). El seguro de vehículos funciona exactamente igual”, consideró.

Por su parte, Elián Villegas, presidente ejecutivo del INS, fue más fuerte y catalogó las advertencias de Pedro Muñoz como absurdas y gravísimas.

“Me parece gravísimo que un diputado diga una cosa de esas. Ya que dice que está ocurriendo, debería de probar de alguna forma cómo es que está ocurriendo eso (...). Entonces, no, de ningún modo vemos la más mínima posibilidad de que este tipo de cosas ocurran, entonces, es absolutamente absurdo el planteamiento que hace (Muñoz)”, recalcó.

El jerarca del INS dijo también que a la institución “le genera tranquilidad” que todo el mundo sepa dónde están las repuesteras y los talleres mecánicos, regentados, según él, “por gente decente y trabajadora que no se van a prestar para poner repuestos mal habidos”.

La Nación consultó a varias empresas distribuidoras de vehículos nuevos si ven algún riesgo para sus negocios con el nuevo modelo de imdenización del INS. La mayoría de las firmas prefirió no contestar directamente la consulta.

La excepción fue el Grupo Q, que distribuye marcas como Hyundai, Isuzu y Chevrolet. Esa compañía indicó, a través de su director regional de Respuestos y Productos Automotrices, Nayid Aguilar, que el pago directo al cliente del INS llevará al mercado a entrar en un periodo de adaptación.

“Lo importante es comunicar a los clientes correctamente sus derechos y la metodología y que se tengan en claro los beneficios del uso de repuestos originales (...). Un incumplimiento en el uso de los repuestos correctos se podría considerar como una causa para la pérdida de garantía (del vehículo), pero más importante, en el valor del vehículo o afectando su valor de reventa", afirmó.

Y le recomendó a los clientes consultarle a la agencia donde compró el vehículo cuál es la red de talleres aliados de la marca. Aguilar dijo que su empresa está en constante comunicación con el INS para compartir experiencias y mejorar los procesos que afectan a los clientes.

Datos de la Superintendencia de Seguros (Sugese) revelan que, a diciembre del 2017, había en el país casi 965.000 vehículos y 321.000 motocicletas cubiertas por el Seguro Obligatorio Automotor (SOA). Ni la Sugese ni el INS detallan en sus páginas electrónicas cuántos vehículos están cubiertos por otro tipo de póliza.

¿En qué consiste el nuevo modelo de indemnización?

-Tiene con fin reducir el tiempo de reparación de un vehículo asegurado.

-Se conformó una red de proveedores compuesta por 103 talleres que estimarán los daños y el costo de la mano de obra y los repuestos. Empero, el asegurado puede escoger finalmente dónde llevará a reparar su vehículo.

-Si el vehículo accidentado funciona como garantía de un crédito (prenda) el pago se realiza por un reembolso, por lo que se debe presentar la factura una vez que esté reparado. Si el vehículo no está prendado, entonces el asegurado podrá optar por el cobro en efectivo de la indemnización.

-El asegurado tendrá 10 días hábiles a partir del incidente para sacar cita para el avalúo en los talleres de la red. El INS tendrá entonces con días hábiles para contestar por correo al asegurado el resultado de su análisis y monto a pagar.

-El cliente deberá comunicarle al INS su acuerdo o desaprobación con el resultado en un plazo máximo de tres días hábiles.

Fuente: INS.