Carlos Alvarado: Gobierno 'no tendrá empacho' en adoptar algunas propuestas fiscales de los sindicatos

Mandatario defendió a su vicepresidente y alegó que él mismo leyó el pliego de peticiones, que asegura darán pie a una oportunidad de negociación con organizaciones de empleados

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El presidente de la República, Carlos Alvarado, aseguró que el Poder Ejecutivo "no tendrá empacho" en adoptar aquellos puntos en los que coincida con la propuesta fiscal que le presentaron los sindicatos el lunes pasado.

En Puntarenas, donde realizó una gira este miércoles, Alvarado defendió a su vicepresidente, Marvin Rodríguez, quien el martes afirmó que la Presidencia veía "con muy buenos ojos" la propuesta de siete puntos que redactaron líderes sindicales, para recaudar entre un 3% y un 4% del producto interno bruto (PIB).

"El vicepresidente califica todo el documento, él dice que se ve con buenos ojos. Uno, porque es una propuesta; dos, yo he leído el documento y hay elementos en los que el Gobierno de la República coincide y quiere trabajar para que sean realidad", afirmó Alvarado.

Agregó que a nadie debe sorprender que el Ejecutivo esté interesado en rescatar algunas de los planteamientos sindicales y que, más bien, es positivo que Gobierno y organizaciones de trabajadores coincidan en varios puntos.

"Hay otros puntos que hay que valorar o en los que no estaremos de acuerdo. Nosotros trabajamos bajo el principio de lo que nos une y, si hay elementos de la propuesta sindical que a nosotros nos parezcan positivos, no tendremos empacho en acogerlos como cualquier buena propuesta, venga de donde venga", aseguró.

La idea de los sindicalistas es que esa reforma alternativa sustituya el paquete de impuestos que presentó el Gobierno y que tramitan los diputados actualmente, bajo el expediente legislativo 20.580.

La diferencia entre ambas propuestas es que Hacienda impulsa reformar el impuesto general sobre las ventas para transformarlo en un impuesto al valor agregado (IVA), con una tasa igual a la actual (13%) y reformar el impuesto sobre la renta.

Hacienda espera recaudar entre un 3% y un 4% del PIB, con una combinación de medidas para recortar el gasto público y la aprobación de la Ley para el Fortalecimiento de las Finanzas Públicas.

No obstante, los sindicatos creen que la reforma es regresiva, pues el IVA impacta los bolsillos de pobres y ricos por igual, y alegan que la reforma a renta no genera la progresividad que ellos pretenden.

Por esto, plantean que se grave a los grandes contribuyentes con tasas de entre un 30% y un 36%.

También quieren esas tarifas del impuesto sobre la renta para las ganancias generadas por los "intereses de usura" que cobran los bancos por las tarjetas de crédito, gravar los capitales golondrina y a las empresas que están en régimen de zonas francas, entre otras medidas.

Según Alvarado, se debe estudiar con calma la propuesta tributaria sindical, porque cree que eso da la oportunidad para renovar el diálogo con los sectores.

"Eso yo lo veo muy positivo, y hay que seguir trabajando en esa dirección", enfatizó el mandatario.

El lunes, cuando la Presidencia no les aceptó su pliego de peticiones, que incluía la de retirar el plan fiscal de la corriente legislativa, los sindicalistas amenazaron con tomar "medidas más drásticas" en contra del Gobierno de Alvarado.

Además, acusaron al gobernante de mostrar una actitud "dictatorial" con esa negativa a acatar sus propuestas.

Casa Presidencial no ha respondido a esas afirmaciones y, por el contrario, ha mostrado una actitud diplomática y abierta a seguir negociando con los sindicatos, que se oponen al paquete de impuestos y las medidas de recorte del gasto público que anunció el Gobierno hace un mes.