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El número seis adquirió ayer una connotación cabalística para la Sociedad Interamericana de Prensa (SIP), al coincidir con la cantidad de periodistas que han sido asesinados en los últimos seis meses en nuestro continente.

Tres comunicadores colombianos, dos guatemaltecos y un brasileño fueron víctima de mortales ataques perpetrados por aparentes sicarios de la guerrilla, el narcotráfico y el hampa que aún no han sido llevados ante la justicia.

Los seis crímenes activaron una señal de alerta durante el segundo día de sesiones previas a la inauguración oficial de la reunión de medio año de la SIP, programada para hoy a las 9:30 a.m. en el hotel Camino Real.

Dichos casos -y un sinnúmero de denuncias sobre atropellos contra el libre ejercicio del periodismo- fueron presentados ante la Comisión de Libertad de Prensa e Información por sus 24 vicepresidentes regionales. (Véase recuadro).

Todos estos informes semestrales deberán recibir el visto bueno de la junta de directores de la SIP, el martes.

Otro reporte controversial fue el de Cuba que incluso motivó al periodista Julio César González, nacido en la isla pero residente en Miami, Florida, a pedir una resolución fuerte y contundente contra el gobierno de Fidel Castro.

El informe -leído por Eduardo Ulibarri, director de La Nación, en representación del cubano radicado en Estados Unidos Roberto Fabricio- califica la situación en ese país como "la más represiva de la década de los 90".

Señala una serie de atropellos como el arresto de 20 reporteros. Estos y otros hechos que fueron confirmados por la periodista María de los Angeles González, residente en La Habana, quien envió un testimonio grabado.

También se dio lectura a una carta enviada por Raúl Rivero, director de la agencia noticiosa Cuba Press, a quien se le impidió salir de la isla para asistir a la reunión de medio año en Costa Rica.

Al respecto, anoche el expresidente Oscar Arias Sánchez abogó por una mayor apertura en esa isla como parte de los pasos que, en su opinión, se deben seguir para establecer un pacto a la solidaridad que permita combatir la violencia.

Su propuesta fue el tema de fondo del coctel que tuvo la SIP en el Country Club de Costa Rica. (Nota aparte).

En el caso de Costa Rica, se reportó una "preocupante y creciente" tendencia de funcionarios de órganos del Estado a acceder a constestar preguntas de la prensa solo si estas se les formulan por escrito.

También se cuestiona la reforma al Código Electoral que, entre otros, procura impedir la publicación de encuestas dos días antes y el día de las elecciones. Preocupación

El tema de los seis periodistas recién asesinatos preocupó ayer a la SIP no solo porque elevó a 161 los comunicadores que han sido ultimados en los últimos siete años, sino porque sugiere un reverdecer de la represión.

Las víctimas fueron los colombianos Alvaro Gómez, excandidato presidencial y director del diario Nuevo Siglo; Alfredo Antonio Matiz, propietario de una emisora, y Ernesto Acero, presidente del círculo de periodistas de la ciudad de Armenia.

También están los guatemaltecos Edwin Estuardo Masilla de León, corresponsal de Radioperiódico Radar Informativo, y Rafael Rodríguez Zea, narrador de beisbol, así como el brasileño Mario Lucio Almeida, editor de TV Manchete.

El uruguayo Danilo Arbilla, director de la revista Búsqueda y presidente de la Comisión de Libertad de Prensa e Información de la SIP, reconoció ayer a La Nación que estos hechos son vistos con preocupación.

Afirmó que los seis asesinatos -sumados al hecho de que, desde octubre de 1995, está desaparecido el mexicano Cuauhtémoc Cornelas- impiden afirmar contundetemente que haya mejorado la libertad de prensa a nivel interamericano.

Arbilla indicó que, con relación al reporte de hace un año, se percibe una "pequeña mejoría", pero que siguen prevaleciendo los intentos para coartar los derechos de los periodistas por medio de leyes y fallos judiciales.

Agregó que en la reunión de medio año de Costa Rica se ultimarán detalles de un proyecto sobre los crímenes sin castigo contra periodistas con el fin de dar a conocer este problema y hacer conciencia sobre su seriedad.

Arias sugiere pacto contra la violencia

Hacer un pacto de solidaridad en la lucha contra la violencia, propuso anoche el exmandatario costarricense y premio Nobel de la Paz 1987, Oscar Arias Sánchez, a los periodistas de nuestro continente.

El planteamiento tuvo lugar durante una cena que La Nación ofreció a los delegados a la reunión de medio año de la Sociedad Interamericana de Prensa (SIP), a partir de las 7 p.m., en el Country Club.

Según Arias, con ese acuerdo los medios de comunicación adquirirían el compromiso de transmitir a las poblaciones no solo informaciones sobre actos violentos, sino también noticias referentes a los esfuerzos que se hacen para erradicar este mal.

"Muchas veces nos preguntamos, tal vez un poco frustrados, por qué la información periodística ha de poner más énfasis en las consecuencias inmediatas de los hechos aislados que en las causas de esos hechos; porqué, mientras se informa profusamente sobre aristas triviales de los acontecimientos, nuestras sociedades ignoran tan importantes avances en la prevención de la violencia", manifestó.

En este sentido, invitó a los hombres de prensa presentes en dicho encuentro a reforzar la lucha contra el régimen de Fidel Castro, "que no ha dado muestras de apertura o de flexibilidad"; la corrupción latinoamericana, "una de las mayores debilidades de la democracia", y la producción, comercio y diseminación de armas en el mundo, "el bazar de la muerte".

"Pocos se encuentran, como ustedes, en posición de contribuir a la erradicación de estas y muchas otras distorsiones e hipocresías. A la libertad de informar, por la que ustedes luchan de manera tan distinguida, hay que unir el deber de no deformar la verdad", concluyó Arias.