Asamblea rechaza ingreso de escoltas presidenciales armados al edificio legislativo

Presidencia de la República hizo solicitud mediante el ministro de Seguridad, Michael Soto; reglamentación interna del Congreso impide entrada de personas con armas

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La Asamblea Legislativa rechazó que los escoltas del presidente de la República, Carlos Alvarado, ingresen armados a su nuevo edificio el próximo martes 4 de mayo, día en que el mandatario rendirá su último informe de labores.

El permiso fue solicitado por la Presidencia de la República por intermedio del ministro de Seguridad, Michael Soto.

El rechazo se produjo debido a que el jerarca del Directorio, Eduardo Cruickshank, solicitó un criterio al departamento de Asesoría Legal, y este respondió que la reglamentación interna del Poder Legislativo impide el ingreso de personas con armas a sus instalaciones.

La respuesta de la Asesoría Legal llegó a la presidencia del Congreso el viernes 23 de abril y explica que, si bien se reformó la Ley de Armas y Explosivos recientemente y esta permite que integrantes de los cuerpos de policía armados, en el desempeño de sus funciones, entren a edificios públicos, los escoltas no son exactamente policías.

“En una conversación que tuve con el ministro de Seguridad, Michael Soto, me comunicó que la escolta del presidente quería hacerse responsable de la seguridad del presidente, cuando llegue a la Asamblea, como en los distintos lugares a los que va él”, indicó Eduardo Cruickshank.

El jerarca del Directorio añadió que el reglamento de visitación interno de la Asamblea les genera inconvenientes a los escoltas, porque no pueden ingresar con sus armas al edificio.

En su argumentación, el ministro Soto expuso que la modificación a la Ley de Armas establece una excepción y que ellos pedían que Cruickshank revisara el tema.

“Se ha dicho muchas veces que la Asamblea tiene un cuerpo de seguridad mínimo, apenas para la vigilancia de las cosas mínimas. Yo revisé el tema y solicité un estudio del departamento Legal”, apuntó el restauracionista.

Aunque el criterio jurídico asegura que el Directorio tiene la potestad de reformar el reglamento de visitación, para permitir el ingreso de los escoltas presidenciales con armas, Eduardo Cruickshank descartó que él vaya a hacerlo.

“Para nada. Yo, en mi calidad de presidente, lo que hice fue remitirle al ministro Soto la resolución de la asesoría legal, cerrando el tema por ahí, en cuanto a este Directorio se refiere”, indicó.

El director ejecutivo de la Asamblea, Antonio Ayales, enfatizó que la reglamentación que impide el ingreso de cualquier persona con armas al Congreso ha estado vigente por muchos años y siempre se ha respetado.

“Las veces que se ha solicitado el ingreso de personas armadas, siempre la Unidad de Seguridad manifiesta su posición en contra, fundamentada en que la Asamblea tiene su propio régimen y fundamentación, su reglamentación. Se ha respetado por años”, acotó.

Ayales enfatizó que solo el Directorio tiene la potestad de reformar esas reglas.

Consultada sobre el informe legal, la jefa de Seguridad del Congreso, Magaly Camacho, respondió que ella conocía un informe anterior, con base en el cual se negaba ese ingreso.

“Yo tengo 20 años de trabajar en la Unidad de Seguridad de la Asamblea y nunca ha ingresado alguien armado. Existe reglamentación interna que incluso impide el ingreso de policías armados, a no ser que haya un incidente mayor y se le pida un permiso especial al Directorio, de parte del ministro correspondiente”, apuntó.

Camacho dijo que el Congreso tiene la seguridad y los controles necesarios para proteger a todas las personas presentes y agregó que, tanto el 1.º de mayo como el 4 de mayo, la Asamblea Legislativa va a estar cerrada al público por la pandemia de covid-19.

“El riesgo para el presidente y para los diputados se disminuye al máximo. Solo vamos a estar los departamentos encargados de la organización de las actividades y la prensa”, explicó la jefa de Seguridad.

Camacho agregó que, en las dos ocasiones anteriores en que Carlos Alvarado acudió al nuevo edificio legislativo, su seguridad también pidió el ingreso de escoltas armados, por medio del jefe de escoltas del presidente y del director de la Dirección de Inteligencia y Seguridad Nacional (DIS), Eduardo Trejos.

Esta vez, tal como reveló Cruickshank, la petición llegó de parte de Michael Soto.