A la vez que se gestionará su inscripción ante el Registro Civil como nuevo presidente del Partido Liberación Nacional (PLN), Rolando Araya Monge logró ayer un acuerdo a su favor por parte del directorio político de la agrupación.
La cúpula liberacionista decidió dejar en las manos del Registro determinar la validez de la Asamblea Plenaria del sábado anterior, en la que el político resultó electo como presidente del Comité Ejecutivo. Asimismo, se acordó convocar a una nueva asamblea para el sábado, 8 de julio, con el fin de someter a ratificación la elección del presidente.
Según se informó, el acuerdo provino luego de que Araya Monge le comunicara a los miembros del directorio su desinterés para postularse como candidato presidencial en 1998, lo que habría ayudado a alimar algunas de las asperezas previas y posteriores al polémico encuentro.
El exministro de Obras Públicas y exdiputado Rolando Araya Monge reconoció, al finalizar la sesión de la cúpula liberacionista -que se dio cita ayer en la mañana en la sede de la agrupación, el Balcón Verde, en Sabana Oeste-, que habían logrado tras varias horas de discusión un arreglo político a las diferencias que se sostenían desde el sábado sobre la legitimidad de la Asamblea Plenaria liberacionista.
El secretario general del PLN, Wálter Coto Molina, afirmó que será el Registro Civil el que determine los efectos de la Asamblea y la votación que se realizó.
"La parte jurídica del problema se desplaza a lo que pueda decir el Registro Civil, y en el plano político existe la buena voluntad de los miembros del Directorio de reconocer la expresión de una voluntad mayoritaria en favor de la presidencia del Araya y hacer posible que en la próxima asamblea se exprese por cauces nítidos", comentó.
Trascendió ayer que un grupo de dirigentes que se oponen a los resultados de la sesión del sábado anterior podría presentar una apelación al Registro Civil con el propósito de impugnar la elección. Esta información no pudo ser corroborada.
Para el dirigente Carlos Manuel Castillo, los acuerdos del sábado no existen ni son válidos. "Existe un acta previa en la que el Secretario General, así como los miembros del Tribunal Supremo de Elecciones, determinan que no había quórum. De ahí en adelante no puede pasar nada; ya eso no es asamblea: es un grupo de gente reunida", comentó Castillo al salir de la sesión del Directorio de ayer.
Este malestar tuvo eco ayer en la Asamblea Legislativa cuando el diputado liberacionista, Víctor Julio Brenes, adelantó que presentará ante el Tribunal Supremo de Elecciones una carta en la que expondrá que él y otros cuatro diputados se salieron del recinto precisamente cuando ya se iba a realizar la elección, lo que hizo que se rompiera el quórum de 38 asambleístas.
Pero no todos están de acuerdo con esta posición. El miembro del Directorio, Rodolfo Navas, expresó: "Esto se va a someter al Registro Civil, y la legalidad no es a don Carlos Manuel al que le corresponde definirla."
?Ratificación?
Durante la sesión del sábado anterior se acordó realizar una nueva cita el domingo 2 de julio. Pero según el acuerdo del Directorio Político de ayer, la Asamblea Nacional liberacionista se volverá a reunir el sábado 8 del próximo mes para conocer la elección del tesorero del PLN, la modificación al procedimiento de elección de los candidatos a diputados y para elegir las plazas que se encuentran vacantes dentro del Directorio. El punto primero es la resolución sobre la presidencia.
La elección de Araya marca el terreno en dos direcciones: por una parte, deja claro que no aspirará a la candidatura presidencial desde el cargo de presidente del PLN; en segundo lugar, que incorporará en el menor tiempo posible a los expresidentes de la República Oscar Arias Sánchez y Luis Alberto Monge Alvarez.
En cuanto a Castillo Morales, reconoció que mantenía una discrepancia con su compañero de partido sobre la asamblea del sábado, pero que ayer, durante la sesión del Directorio, le expresó que mientras él -Castillo- esté de por medio, no se inmiscuirá en precandidatutas presidenciales.
Los exmandatarios se incorporarían a un órgano consultivo del PLN, instancia que deberá tomar en cuenta el Poder Ejecutivo cuando realice negociaciones con el Partido Unidad Social Cristiana (PUSC), como la contraparte liberacionista.