El próximo 1.° de agosto los habitantes de más de 1.000 viviendas del cantón de La Unión deberán prescindir de sus vehículos o transporte público para salir de sus casas, debido al cierre de la carretera vieja que conduce a Cartago.
Pedro Soto, encargado de gestión cultural de la Municipalidad de La Unión, comentó que no cuentan con un censo de cuántas son las personas que deben reducir sus actividades por el paso de la romería, pero calcula que al menos seis comunidades son las que realmente se verán limitadas.
“El tema del acceso, hasta el momento, no se ha constituido en un problema. Por lo general se utilizan rutas alternas como San Ramón o San Diego. Pero si hay comunidades que del todo quedan bloqueadas por tantos romeros, es una condición que cada año los vecinos debemos asumir”, comentó.
Allen González, vecino de San Rafael, asegura que tras 12 años de tener su barbería en la vía principal ya se acostumbró a que los 1°. de agosto no lleguen muchos clientes y por el contrario miles de personas pasen frente a su negocio.
“Me afecta el día exacto, pero como se trata de la Virgen no importa que no llegue nadie. Igual uno abre por si vienen los vecinos, porque los clientes de más largo que vienen en carro llegan otro día”, comentó el barbero de 74 años.
Para esta fecha el ayuntamiento negó a los vecinos los permisos para la venta de productos perecederos, con el propósito de evitar contaminaciones en los alimentos y accidentes por la falta de regulación en la instalación eléctrica o manejo de tanques de gas.
Soto explicó que prefieren darle la oportunidad a los negocios que pagan su patente todo el año y no solo aquellos que llegan por un par de días.
Miguel Solís, propietario del super La Vaca Vaquera, ubicado sobre Calle Vieja, mencionó que pese a que el acceso en vehículo está limitado el día de la romería, sí se hace el agosto.
“Comercialmente es muy bueno. Algunos años alcanza para pagarle a la marca y nos queda un porcentaje pequeño. Después de cierta hora hay que tener cuidado porque no todo el mundo va con fe, después de las 11 p. m. suben muchachos dañinos que se van sin pagar”, mencionó el comerciante.
El municipio autorizó a los negocios con permiso de venta de alimentos y abarrotes extender sus establecimientos hasta la orilla de la carretera.