Dos bares y una discoteca del Centro Comercial Plaza Colonial, en Escazú, se encuentran en la mira de las autoridades, debido a varias quejas que se han presentado por la venta de licor a menores de edad, el funcionamiento sin los permisos respectivos y que los negocios exceden su capacidad.
Las denuncias, tanto de un grupo de vecinos como de la Defensoría de los Habitantes, no se limitan solo a eso: afirman que ese centro comercial no fue diseñado para concentrar la gran cantidad de personas que acuden los fines de semana.
Los bares Paladivs, Coconut Grove y la discoteca Sapo Verde, son los negocios que desde finales del año pasado tienen problemas con la Municipalidad de Escazú y la Gobernación de San José. "Los escándalos son todos los fines de semana. Incluso los jueves viene gran cantidad de gente a estos lugares, en donde los jóvenes toman licor a diestra y siniestra", dijo Willi Guier, uno de los quejosos.
Ante esto, la Municipalidad de Escazú selló temporalmente el año pasado los dos bares, porque no contaban con el permiso de funcionamiento.
"Hay persecución"
El dueño de Paladivs, Gabriel Iglesias interpuso un recurso de amparo el 17 de noviembre Gobernación por el cierre del negocio, el cual fue declarado sin lugar el 7 de diciembre del año pasado. Ello indica que estos locales no pueden seguir operando.
La Nación consultó sobre esto al municipio. Sin embargo, Silvia Castro, del departamento de rentas y cobranzas, dijo que no han sido notificados y por lo tanto no pueden cerrar los bares.
Al no cumplir con las órdenes municipales esta institución interpuso una denuncia penal contra el bar Coconut Grove en el Centro Comercial Plaza Colonial por desacato ante el funcionamiento sin la respectiva patente o licencia municipal.
El dueño del establecimiento, el argentino Juan Raúl Manzur dijo que cuenta con la respectiva patente de licores, la cual es alquilada.
"Lo que pasa es que hay persecución contra mí y mi negocio", aseveró el extranjero al ser consultado sobre el asunto.
Por su parte, el ejecutivo municipal de Escazú, José Miguel González, manifestó que si bien es cierto Coconut Grove tiene la patente de licores, no pueden otorgar los permisos respectivos al no tener el aval de la Gobernación.
Silvia Castro manifestó que en el caso de la Discoteca Sapo Verde, su representante mostró un informe que iba a ser enviado al Instituto Costarricense de Turismo (ICT), recomendando que se declarara al lugar de interés turístico.
El titular del ICT, Carlos Roesch, informó que la solicitud ya fue presentada por los dueños del Sapo Verde, pero todavía no ha llegado a la junta directiva.
Una declaratoria de interés turístico permite a los negocios establecerse en cualquier lugar, ya sea cerca de una iglesia o de un centro educativo.
Exceden capacidad
Los tres bares de Plaza Colonial en Escazú exceden su capacidad de ingreso de clientes, según un informe hecho por funcionarios del Instituto Nacional de Seguros (INS) que revisaron los locales con el fin de verificar la seguridad.
Según la Defensoría de los Habitantes, el documento señala que la Discoteca Sapo Verde cuenta con un área de 297 metros cuadrados y tiene una capacidad de 700 personas lo que indica que albergaría dos personas por metro cuadrado. "Pero el caso más grave es de el Bar Paladivs, que tiene 132 metros cuadrados y según el informe del INS tiene capacidad para 700 personas. Esto sería que 7 personas estarían en un metro cuadrado", aseveró el Defensor del Habitante, Rodrigo Carazo.
Sin embargo, el dueño de Paladivs, Gabriel Iglesias, dijo que en el negocio entra un máximo de 250 personas y no lo que indica el informe.
En el caso particular del Sapo Verde, el INS solicitó eliminar los asientos tipo gradas, ya que el reglamento de construcciones en el artículo XI.12 establece que no se permitirá el uso de gradas como asientos.
"Me toma por sorpresa la noticia de ese informe, pero no vamos a quitar ningún asiento-grada que pusimos", dijo uno de los dueños del Sapo Verde, José Manuel Agüero.
Agüero explicó que siempre han querido cumplir con todos los requisitos que la ley exige, sin embargo no comprende esto, pues todo fue avalado por las autoridades correspondientes.