La constructora H Solís cedería el proyecto de ampliación de los 50 kilómetros entre Barranca y Limonal, según anunció este jueves el ministro de Obras Públicas y Transportes, Luis Amador, durante su informe de gestión.
“Hernán Solís ya aceptó que lo preferible es que salga de ahí y está dispuesto a firmar la cesión, ese es el proceso de las negociaciones que hemos llevado a cabo en el MOPT (Ministerio de Obras Públicas y Transportes)”, aseveró el jerarca.
Amador explicó que se comunicaron con empresas que mostraron algún interés cuando salió la licitación original y que no estuvieran en “la lista negra” del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), que es de dónde provienen los fondos. A esas firmas se les solicitó valorar la cesión, lo que implica ver el estado actual de los trabajos, lo que falta y si pueden completar la obra con el presupuesto existente.
Asimismo, dijo, debían revisar su capacidad operativa y estados financieros. Luego de esa verificación, las firmas CHEC, Power China y Holcim confirmaron interés.
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“Todos analizaron los aspectos, sin embargo, había inconvenientes, porque el proyecto inicial estaba en asfalto, no en concreto y era muy complicado. Holcim no le podía llegar al financiamiento; quedaron CHEC y Power China”, manifestó.
En este momento, CHEC está presentando requisitos y Power China ya entregó el paquete, que está en valoración.
Amador dio esta información minutos después de aseverar que la estrategia con CHEC en su desempeño en la ruta 32 era de “zanahoria y garrote”, pues la empresa está atrasada en la entrega de proyecto, que debía concluirse en febrero de 2023, pero al parecer, se prolongará varios meses más.
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“Tenemos que valorar si están todos los requisitos, todavía no ha terminado; tenemos que valorar cuál es el más conveniente y ese es el que se va a ir al BID para que dé la no objeción. En este momento, no hay nada escrito en piedra”, expresó.
Si la decisión no se toma la próxima semana, sería en enero, aunque él quería hacerlo desde noviembre.Aseguró que con la cesión de contrato, la obra no puede encarecerse aunque no rechazó que se atrasaría más.
Aunque La Nación consultó a Amador sobre cómo se da la participación de CHEC con todos los problemas existentes en la ampliación de la ruta 32, advirtió que no podía referirse a una empresa en específico.
Atrasado
El proyecto vial Barranca-Limonal fue encargado al consorcio H Solís-La Estrella por $175 millones y tenía un plazo original de construcción de 30 meses.
La obra recibió orden de inicio en agosto de 2020 y una de las razones del rezago son las expropiaciones y la lenta ejecución de parte de la empresa.
En julio anterior, cuando se dio a conocer el último informe de la Auditoría del MOPT el avance de este proyecto era de apenas el 7%.
El monto y plazo fijados incluían la ampliación del tramo conocido como La Angostura, al ingreso de Puntarenas, el cual, según dijo Amador, se encuentra “botado”.