Herencia patriótica: Tradicional izado de bandera en Tres Ríos cumple 60 años

La familia Vega continúa la tradición que reúne a amigos y a la comunidad cada 15 de setiembre desde 1963

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Cada 15 de setiembre, las montañas de Tres Ríos se engalanan con los colores blanco, azul y rojo, de la bandera de Costa Rica. La familia Vega cultivó su propia tradición, que fue adoptada con entusiasmo por la comunidad, propagando el patriotismo entre familiares, amigos y vecinos.

Siguiendo una costumbre arraigada desde hace 60 años, en cada Día de la Independencia, Rigoberto Vega Alvarado, de 91 años, reúne a su familia.

Esta vez, a las 4:30 a. m., se congregaron en la residencia de uno de sus hijos para cargar camiones con tubos, tela y la bandera costarricense con destino al Potrero La Rosa, ubicado en la fila de potreros de La Carpintera.

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Una vez en el lugar, aproximadamente 30 miembros de la familia Vega procedieron a izar la bandera al compás de música tradicional costarricense, disfrutando de comida típica y la calidez que caracteriza a su tradición familiar.

También, desplegaron telas de unos 15 metros de ancho por metro y medio de alto a lo largo de una ladera, creando así una imponente representación de la bandera costarricense visible desde el centro de Tres Ríos.

“Para mí, esto es un sueño que ni yo mismo puedo creer. La tradición la comencé con mi papá y cuatro de mis hermanos. Teníamos que venir aquí arrastrando esas cargas que hoy suben en camiones. Para traer esas cargas, tuvimos que hacer dos viajes a estas partes altas de La Carpintera, y la segunda vez ya veníamos gateando. Nunca imaginé que esto sucedería como hoy”, detalló Rigoberto Vega, quien transmitió esta tradición a su familia.

Vestido con traje típico y un sombrero alusivo a Costa Rica, Rigoberto espera llegar a los 100 años para continuar compartiendo su legado con sus hijos, nietos y bisnietos. “Es algo muy significativo para mí, y cada día la tradición cobra más fuerza. Los más pequeños desde muy temprana edad tienen la idea de estar junto a la bandera”, afirmó.

Recordando sus humildes inicios con apenas seis personas, se anticipa que este viernes, probablemente, más de 50 personas se unieron a la tradición. Todos los Vega y amigos cercanos que llegaron al lugar para disfrutar de la comida típica preparada en un fogón, que incluye café, agua dulce, sándwiches, olla de carne y menudos de pollo, entre otros manjares.

Patriotismo rompió fronteras

El patriotismo que ahora impregna a Tres Ríos tuvo su origen en otro país centroamericano: El Salvador.

En uno de sus viajes en bicicleta, que tuvo lugar alrededor de los años 54 o 55, en el que recorrió desde Costa Rica hasta México, Rigoberto recuerda haber hecho una parada en El Salvador para descansar.

En ese lugar, le ofrecieron una taza de café que llevaba la inscripción “Costa Rica”. Este gesto dejó una profunda impresión en él, y al regresar, decidió: “Quiero poner una bandera en La Carpintera”. Así, dio inicio a la tradición.

“Sentí la necesidad de izar una bandera en recuerdo de los momentos maravillosos que viví en San Salvador, y así lo hice. A los pocos años, obtuve el permiso para hacerlo en la finca. Hemos tenido varios potreros donde hemos colocado la bandera: comenzamos en la finca de Joaquín Tinoco, luego en este potrero de los Richmond y el campo escuela”, relató Rigoberto.

Desde 1963, la tradición de la familia Vega ha perdurado durante 60 años, manteniendo vivos la música, el sentimiento familiar y, sobre todo, el amor por Costa Rica a lo largo del tiempo.