Parisinos también rezaron por Costa Rica

Laura Chinchilla participó en misa de celebración de 850 años de Notre Dame

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París. La paz, el pueblo y los gobernantes de Costa Rica se colaron ayer en las oraciones de varios centenares de parisinos que abarrotaron la catedral de Notre Dame.

Ellos llegaron para celebrar los 850 años de la enorme catedral que fue levantada en el corazón de la ciudad , en la cual se forma una especie de isla, pues está rodeada por las aguas del río Sena.

La petición la hizo monseñor Eric de Moulins-Beaufort, obispo auxiliar de París de frente a la presidenta Laura Chinchilla, quien ocupó el primer asiento de la columna central de esta iglesia gótica, una de las más antiguas del país.

“Estoy muy agradecida con el obispo auxiliar de esta catedral no solo por habernos recibido personalmente, sino también por la mención que hizo de Costa Rica. Pidió por Costa Rica. Estamos muy agradecidos por este gesto, muy hermoso”, expresó al salir de la catedral y enfrentarse a los 8° Celsius que dominaron ayer París.

Ella fue la representante diplomática de más alto nivel en la celebración religiosa, pues también acudieron embajadores, entre ellos el costarricense Carlos Bonilla, así como los de Bélgica, Luxemburgo, Hungría y Perú.

Arranque de gira. Con esta misa concelebrada y al ritmo de una orquesta de trompas musicales, la mandataria costarricense comenzó sus actividades en Europa, viaje que la mantendrá tres días más en la capital francesa para luego trasladarse a Roma.

En el Vaticano, será recibida por el papa Francisco y el secretario de Estado, Pietro Parolin.

Ayer, Chinchilla, junto con los ministros de Comunicación y Relaciones Exteriores, Carlos Roverssi y Enrique Castillo, respectivamente, tuvieron una reunión con representantes de la fundación para la agricultura sostenible Syngenta.

La cita se realizó en el hotel Shangry La, que fuera la antigua casa del sobrino nieto de Napoleón Bonaparte, el príncipe Roland Bonaparte. Aquí se hospeda la presidenta como una cortesía del Gobierno francés.

Marco Ferroni, director ejecutivo de la fundación, comentó que el propósito de su organización es hacer una propuesta al país para modernizar, ofrecer soluciones tecnológicas y de organización en materia agrícola.

“Yo sé que Costa Rica tiene un problema grave con la roya, tenemos soluciones a nivel mundial que podemos hacer llegar”, dijo.

En nuestro país, 42.766 caficultores se vieron afectados por esta plaga, lo que obligó al Gobierno a movilizar ¢20.000 millones en setiembre pasado.

Chinchilla espera que una misión de Syngenta venga al país en diciembre para analizar alternativas de apoyo a los productores.