Si usted ya había empezado a hacer cuentas para estirar su presupuesto de fin de año, conviene que revise sus números. Probablemente la otra semana tendrá que pagar ¢9,30 más por litro de gasolina regular y ¢6,10 más por la súper, según acordó ayer el Servicio Nacional de Electricidad (SNE).
El SNE aprobó un alza de un 14,60 por ciento en el precio de la gasolina regular, que costará ¢72,80 el litro, y de un 8,68 por ciento en la súper (¢76,40).
En consecuencia, el valor del litro, en el caso de la primera, pasará de ¢63,50 a ¢72,80 y, en el de la segunda, de ¢70,30 a ¢76,40.
El diesel, muy usado en el transporte de pasajeros y carga, tendrá una leve baja. El litro, que actualmente vale ¢52,80, se venderá a ¢51,50. También el SNE dispuso pequeñas rebajas en los precios del canfín y del gas licuado para uso doméstico.
El alza probablemente entrará a regir la próxima semana, indicó el director de esa entidad, Leonel Fonseca, ya que el SNE enviará el próximo fin de semana el acuerdo para su publicación en La Gaceta.
El organismo regulador decidió aprobar dicho incremento tras realizar un estudio ordinario que tomó en cuenta un alza y una rebaja en el impuesto selectivo, el tributo de importación, la inflación, la devaluación, los costos de la Refinadora Costarricense de Petróleo (Recope) y el incremento en los precios internacionales del crudo.
¿Para qué?
Además de compensar el alza en las cotizaciones del mercado mundial, el Poder Ejecutivo anunció que utilizará los ¢4.000 millones que obtendrá por ese concepto para la reparación de carreteras y para programas de reforestación de pequeños productores. Unos ¢3.000 millones se invertirían en el primer rubro y el dinero restante en el segundo.
Pero de la medida anunciada ayer también resultarán beneficiados los expendedores de combustibles ya que el SNE incluyó en esa medida un aumento del 1,09 por ciento en el margen de utilidad de estos comerciantes.
En contraposición, a los gasolineros se les exigirá contar con una certificación del Ministerio de Recursos Naturales, Energía y Minas (MIRENEM), en la que conste que cumplen con los requisitos técnicos, de salud y de seguridad para operar.
Esa entidad colocará distintivos en las estaciones de servicio que atiendan a cabalidad este requerimiento para que el consumidor pueda escoger las que le brinden mejor servicio.
Igualmente se les demandará la presentación de sus estados de cuenta, certificados por un contador público autorizado, como condición para disfrutar de ese aumento en el margen de utilidad.
¿Y qué ocurre si el Gobierno decide procurar un nuevo incremento en los combustibles? Fonseca explicó que el estudio realizado incluyó las previsiones correspondientes a lo que resta de este año y para todo el próximo, por lo que un nuevo incremento solo podría realizarse si ocurre un alza desmedida en la inflación, en el ritmo de devaluación y en los precios internacionales del petróleo.
Participó en esta información Cristina Cubero, colaboradora de La Nación.
Descontento en la calle
El anuncio de otro incremento en el precio de los combustibles no cayó nada bien entre los consumidores, quienes tampoco creen que parte del dinero recaudado por esa alza se emplee en la reparación de calles.
Así opinaron varios consumidores, entrevistados ayer por La Nación en algunas estaciones de servicio:
Ricardo Chinchilla, bibliotecólogo. "Es una barbaridad, el sueldo se va en aumentos. Cuando sube la gasolina, sube todo lo demás y los salarios siguen igual. Las calles no las van a arreglar; la gente ya no come cuento"
Jenny Espinoza. "Es un susto más. A como están las cosas de caras, cualquier aumento es un horror para el bolsillo. Se supone que uno paga el impuesto al ruedo para que arreglen las calles y siguen igual."
En dos semanas habrá incremento en buses
A partir del 27 de noviembre regirá el alza en las tarifas de buses aprobada para la mayor parte de rutas de áreas rurales y una que otra del área metropolitana, no afectadas por el aumento dispuesto en setiembre.
El incremento, aprobado el 4 de octubre por la Comisión Técnica de Transportes del MOPT, oscila entre el 12 y 15 por ciento. Ayer fue publicado en el diario oficial La Gaceta, pero entrará en vigencia dentro de 15 días.
"No es que se está dando una nueva alza. Las líneas que aumentaron en setiembre no lo harán más; se trata de las rutas que, por no presentar sus papeles de requisitos a tiempo, no pudieron entrar en esa aprobación y no se les autorizó hasta ahora", explicó Héctor Blanco, director de la División de Transportes del Ministerio de Obras Públicas y Transportes (MOPT).
Los requisitos que se solicitaban a las empresas para hacer el cálculo del incremento eran, entre otros, número de buses, demanda real del servicio y costos de operación.
Esa alza, al igual que la efectuada en setiembre, fue calculada por la Dirección General de Estudios Técnicos del MOPT con base en un modelo econométrico para el análisis de cada una de las rutas, el cual toma en cuenta las zonas, estudios de campo y la información suministrada por las empresas transportistas.
Eugenio Vásquez, transportista. "A como están los sueldos no alcanza ni para comprar la bolsa de leche todas las mañanas, menos para pagar más por la gasolina. El timo de que van a arreglar las calles es viejo, los huecos van a seguir".
Jesús González, profesor. "Si el aumento lo respaldan estudios serios, está bien. La situación está difícil para todos; hay que cerrar la faja en gastos que no son necesarios y ayudar al país en lo que se pueda. Hay que ver si arreglan las calles".
Juan Mora, ingeniero químico. "La materia prima de la gasolina no está aumentando, por esto no deberían subirla. Ahora todo va a aumentar, menos los sueldos. Ya con los peajes recaudan para arreglar las carreteras y siguen igual".