Gases contaminantes aumentan en San José

Este artículo es exclusivo para suscriptores (3)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.

Subscribe

Ingrese a su cuenta para continuar disfrutando de nuestro contenido


Este artículo es exclusivo para suscriptores (2)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.

Subscribe

Este artículo es exclusivo para suscriptores (1)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.

Subscribe

En el último año aumentaron las concentraciones de gases contaminantes en los alrededores del hospital San Juan de Dios, la catedral, la avenida 10, el Paseo de los Estudiantes y barrio Cuba.

El tercer estudio sobre la calidad del aire en San José, que realiza la Universidad Nacional, dice que hay más dióxido de nitrógeno en el ambiente respecto al 2005.

Este gas tóxico derivado de la combustión en los motores de vehículos es nocivo para los humanos pues afecta el sistema respiratorio.

La exposición prolongada al dióxido de nitrógeno puede ocasionar lesiones similares al efisema pulmonar por consumo de tabaco.

Jorge Herrera, del laboratorio de análisis ambiental de la UNA, también señaló que en otros sitios de barrio México y barrio Luján aumentaron los niveles de dióxido de nitrógeno.

A modo de hipótesis, dijo que los sitios donde aumentaron los gases tóxicos coinciden con los límites de la zona de restricción vehicular de la capital.

Eventualmente, eso significa que por esas áreas circulan más carros que antes. Se trata de autos que no pueden entrar al centro de la ciudad en ciertas horas del día.

En comparación con el período 2004-2005, en San José sí disminuyó la cantidad de materiales “particulados” que afectan la respiración de los humanos.

Se trata de micropartículas dispersas en la atmósfera conformadas por hollín, metales, cemento o polen. Las concentraciones se redujeron entre un 9 y un 25%, según los diferentes sitios de monitoreo.

Herrera cree que la baja en estas micropartículas se debe a que hoy los combustibles tienen menos concentraciones de azufre respecto a años anteriores.