Unos extraños estacionaron su vehículo el viernes en las afueras de un centro educativo en Purral de Goicoechea, llamaron a varios escolares de ese centro y les mostraron un juego de la ruleta, la cual tenían que girar para ganarse unas gomitas.
Horas después, la Fuerza Pública, tras una denuncia de la directora del centro educativo, detectó cocaína según los resultados de pruebas preliminares.
Según Kattia Grosser, directora de Vida Estudiantil del Ministerio de Educación Pública (MEP), la docente notó que, pasado el mediodía, varios escolares llegaron con las gomitas.
La directora se percató de que todos andaban el mismo paquete, por lo que les preguntó dónde lo habían conseguido.
"Ellos dijeron que las adquirieron cercan de la plaza donde había un carro y unos señores les mostraron un juego de la ruleta donde se ganaron las gomitas", explicó Grosser.
De acuerdo con la funcionaria, la directora del centro educativo se percató de que el paquete no tenía registro sanitario, por lo que llamó a las autoridades. Uno de los menores le entregó una caja con siete paquetes de gomitas que le habían regalado los extraños.
La Fuerza Pública se hizo presente y personal del Programa Regional Antidrogas (PRAD) le realizó pruebas de campo a los dulces. Estas dieron positivo para cocaína, por lo que se procedió al decomiso, informó la Policía.
"Se les hicieron pruebas de campo a las gomitas, dando positivo con cocaína, se decomisaron las gomitas y se investiga su procedencia. Al parecer un vehículo se presentó a la zona y les suministraron esta sustancia a los menores. Al parecer estas golosinas venían empacadas, selladas y ni tenían registros de (Ministerio de) Salud", explicó Daniel Calderón, director general de la Fuerza Pública.
Luego de se divulgara lo ocurrido, varios vecinos se acercaron a los policías para entregar tres paquetes que, supuestamente, contienen ese mismo tipo de golosinas.
Por el momento, Michael Soto, ministro de Seguridad, prefiere no adelantar criterio hasta que no estén listas las pruebas de laboratorio que confirmen si los dulces tenían cocaína.
Kattia Grosser añadió que las maestras del centro educativo, junto con la Dirección Regional, trabajan con los alumnos para hacer conciencia de que hablar con extraños y aceptarles regalos puede poner en riesgo la seguridad y la salud.
"Es importante rescatar que los chiquitos estuvieron en riesgo si hubieran consumido todas las gomitas, había como siete paquetes en toda la escuela. Corresponde ahora investigar al OIJ (Organismo de Investigación Judicial) el caso", manifestó Grosser.