El Liceo José Joaquín Vargas Calvo, en San Pedro de Montes de Oca , lleva seis años tratando de poner en práctica, de manera ordenada, el sistema de repitencia y adelantamiento de materias introducido por el MEP en el 2009. Sin embargo, el director de este centro, Mario González, resume los resultados así: “Este sistema no sirve”.
De los 1.280 alumnos que forman parte de este liceo, 300 adelantan materias.
“El efecto no lo he visto muy bueno, hay un aspecto psicológico en el hecho de adelantar. Esos chicos piensan que no han desertado porque avanzaron al otro año. El factor más negativo es que en algún momento dejan de adelantar, porque no le toman tanto interés a la materia que están llevando.
”Esto produce que tengan mucho tiempo ocioso que podrían utilizar en cosas malas. Se van para otros lados, a veces ni los padres saben cuántas materias están llevando ni dónde están”, explicó González.
Replanteamiento. Para el director, debe haber un replanteamiento del proyecto para que el alumno se vea beneficiado y “no tenga tanta libertad como la tiene ahora”.
En el Liceo Luis Dobles Segreda, en La Sabana, la mayoría de colegiales que cae en el sistema de repitencia y adelantamiento es de sétimo y octavo año. Allí, de los 1.800 jóvenes, hay 150 bajo ese modelo.
“En el camino, los estudiantes se dan cuenta de que no pueden llevar los dos niveles, por lo que deciden retirarse y solo llevar las materias en las que se quedaron. Ellos creen que pertenecen al nivel que adelantan, pero en realidad son del nivel anterior. Esto causa enredos; por ejemplo, los estudiantes de cuarto que se quedan en una materia y adelantan quinto, no pueden ponerse el uniforme de los quintos porque no pertenecen a ese nivel ”, explicó Iván Ceciliano, director de este centro.
Según el funcionario, administrativamente hay un desgaste porque el profesor guía y el orientador se sientan con cada alumno para elaborar los horarios de las materias que perdieron, de modo que no choquen con las asignaturas que van a adelantar. Sin embargo, el esfuerzo se desperdicia porque los alumnos dejan botadas las materias que adelantan.
Ceciliano está de acuerdo en que si el estudiante solo se quedó en una materia, no tenga que repetir todo el año, pero cree que se debe cambiar el mecanismo.
Jacobo Villegas, director del Liceo de Heredia, quien califica este sistema del MEP como un fiasco, dijo que la solución es que los estudiantes solo matriculen las materias que perdieron y que el siguiente año lleven completo el próximo nivel.