Colegiales en Asamblea : ‘Preocupa cómo afecta la objeción de conciencia a los estudiantes’

Brandy Herra, del Liceo La Virgen de Sarapiquí, y David Granados, del CTP de San Pablo de León Cortés, hicieron control político este miércoles

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Los diputados cedieron este miércoles la palabra a estudiantes de colegio para que hicieran el control político.

Fue así como Brandy Herra Gómez, estudiante de undécimo año del del Liceo La Virgen de Sarapiquí, y David Granados Fallas, del Colegio Técnico Profesional de San Pablo de León Cortés, manifestaron a los legisladores algunas de sus inquietudes.

La actividad se realizó en el marco del Día del niño, niña y adolescente, que se celebra este jueves.

Herra aprovechó la oportunidad para expresar a los legisladores su preocupación por el artículo que incluye el principio de objeción de conciencia incluido en el proyecto de Ley Marco de Empleo Público.

A ella le desvela “cómo este artículo afecta a los estudiantes y su educación”.

“Por ejemplo, ¿podrían negarse los docentes y funcionarios a capacitarse en aplicación del protocolo de bullying y a las personas de la comunidad LGTBIQ+ y otros protocolos que son, relativamente, de reciente creación?”, cuestionó la estudiante a los congresistas.

La objeción de conciencia es el derecho de una persona a abstenerse de realizar actos que contravienen ideales o valores éticos y religiosos. Viene contemplada en el plan de ley aprobado en primer debate el pasado 18 de junio.

La joven también compartió los problemas educativos que enfrentó durante la pandemia, como que en su comunidad ninguna empresa ofrece Internet.

“El año pasado pasé muchas dificultades. Las Guías de Trabajo Autónomo (GTA), en su gran mayoría, están adaptadas solo para estudiantes de escenario virtual y eran pocos los profesores que se interesaban en anexar trabajos y ayudar a los otros. Muchas veces enfrenté situaciones en las que tenía que buscar conexión a Internet y el lugar más cercano está a tres kilómetros de donde vivo, esto se dificulta más si pensamos en la situación económica”, dijo la alumna.

Según dijo, la situación hizo que bajara su rendimiento académico, al estar estudiando en casa sin apoyo docente pues de 14 profesores, solo uno la llamó para saber si había tenido algún inconveniente en la realización de las GTA.

La joven afirmó que fueron pocos los docentes que se tomaron el tiempo para explicar la materia y atender las dudas.

El alumno David Granados también se refirió a la brecha tecnológica en la educación a distancia.

“No todos los estudiantes tienen acceso a equipos tecnológicos para ser partícipes activos de una educación virtual o combinada. También puede ser que tengan acceso a ellos, pero a veces no tienen la capacitación necesaria para llevar a cabo el proceso de forma exitosa. Sabemos que no en todos los rincones del país hay acceso al Internet, incluso a energía eléctrica”, reclamó el joven.

Otros temas

La estudiante Herra sugirió a los legisladores que las clases de educación sexual deberían ser obligatorias al igual que cualquier otra materia.

“A pesar de que hay padres que niegan que sus hijos reciban educación sexual, tampoco se comprometen porque, según ellos, van a empezar a tener una vida sexual activa. No se comprometen a informar sobre métodos anticonceptivos o cuando el acto es o no es consensuado”, criticó la estudiante.

Asimismo, se refirió a la necesidad de otras materias importantes para la vida de todo alumno como Educación Financiera, Ambiental y Psicología.

“Siéndoles sincera, la mayoría de la materia que se nos enseña, solo nos la aprendemos para el examen, tristemente es así, y es justo por esto que la gran parte de los estudiantes no aprenden para la vida, solo para un examen”, añadió.

Mostró su preocupación por los estudiantes que ponen sus esperanzas en poder ganar un cupo y una beca en una universidad pública, pero sienten que no están preparados académicamente.

Su intención, afirmó, no es victimizar a los estudiantes, sino exponer una realidad que forma parte de su día a día.

Por último los estudiantes expresaron a los diputados la necesidad de incluirlos en las discusiones que a ellos les atañe y afecta.

“Lo que sea sobre nosotras que sea con nosotras”, concluyó la estudiante.