Tras 145 años de haber sido ordenada por ley, por fin será edificada la “Tumba de los Mora y Cañas”, con el objetivo de reconocer el legado del libertador de Costa Rica, Juan Rafael Mora Porras, y su hermano José Joaquín, así como la valentía del general salvadoreño José María Cañas Escamilla, quienes lideraron la Campaña Nacional de 1856-1857.
La obra se levantará donde se ubica hoy el parque La Merced, el cual se convertirá en una plaza con una cripta que acogerá los restos en medio de dos salas de museo, donde se expondrán recuerdos que se encuentran en colecciones privadas. Sobre esta edificación se ubicará el conjunto monumental y se colocarán tres esculturas de bronce de los héroes.
Así lo dio a conocer este jueves la Academia Morista Costarricense, durante un acto frente al monumento a Mora, en San José. Allí también se hizo presente el alcalde Johnny Araya para firmar un convenio con la organización, la cual suscribió un contrato de fideicomiso con el Banco Nacional para recaudar contribuciones para construir la tumba.
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La entidad bancaria habilitará centros de recepción de donaciones en todas sus oficinas, agencias y sucursales, físicas o virtuales en todo el país, y actuará como un tercero imparcial que recibe, administra y audita el dinero. La meta es recaudar cerca de $4,5 millones y se invitó a empresas, organizaciones y sociedad civil a apoyar la causa.
“El proceso va acompañado con obras municipales en el parque y esas obras la Municipalidad las elabora con su propio presupuesto”, dijo a La Nación el director de la Junta Directiva del Banco Nacional, Mario Carazo Zeledón, quien explicó que la entidad se sumó al proyecto por su compromiso con el desarrollo de los valores nacionales.
Manuel Carranza, presidente de la Academia Morista Costarricense, afirmó que esta obra marcará el fin de una deuda histórica, ya que desde 1876 la Ley N.° 20 ordenó un funeral de Estado y la construcción de la tumba, pero nunca se concretó.
Según dijo, será un homenaje al liderazgo, a ese modelo particular del ser y del deber hacer que distinguió al presidente Mora, a su gobierno, al Estado Mayor, pero también a las milicias que debió reunir y al pueblo heroico que supo reconocer al líder.
“Este monumento honrará no solamente a los líderes, sino al pueblo humilde, a todos aquellos soldados y soldaderas, hombres y mujeres sencillos que compartieron las fatigas y privaciones, el sufrimiento, la valentía y el arrojo en defensa de la libertad. Queremos reflejar el amor a la patria, tantas veces segado en la flor de la juventud de los que cambiaron la tosca herramienta por las armas del ejército expedicionario”, expresó Carranza.
A la actividad fueron invitados el tataranieto del general Cañas, Mariano Guardia Cañas, y la tataranieta de Juanito Mora, Marisia Pinto Echeverria. También se hicieron presentes las banda municipal de San José, el conjunto de liras del Colegio Superior de Señoritas y la banda del Liceo de Costa Rica, acompañada de colegiales que interpretaron el himno nacional en lesco.
“Son cosas que Costa Rica no debió haber dejado de lado por tanto tiempo porque realmente son la base de lo que ha sido el país y son elementos que deben continuar fijando el futuro de nuestra nación. En nombre de toda la familia Cañas agradecemos que se haya tomado esta iniciativa, visualizo que va a ser una plaza espectacular”, declaró Guardia a La Nación.
Cerca de las 10:15 a. m. se realizó la firma del Convenio de Cooperación y Carta de Intenciones entre la Municipalidad de San José y la Academia Morista Costarricense, con el Banco Nacional como testigo de honor. El evento, en donde se respetaron las medidas sanitarias, concluyó con la entonación del Himno Patriótico a Juan Rafael Mora Porras.