Yazoo City, Misisipí, EE.UU. AP. Autoridades y residentes de media decena de estados de EE. UU. trabajaban hoy para recuperarse de los daños que dejó el paso de varias tormentas violentas durante el fin de semana, que dejaron al menos 10 muertos por un tornado en Misisipí y dos decesos en la vecina Alabama.
Morgan Hayden y Joe Moton caminaban con cuidado entre clavos, cristales rotos y los restos de su casa destruida por un tornado. La pareja esperaba casarse hoy pero, con lo poco que les queda, no estaban seguros de qué hacer.
“Bueno, todo saldrá bien”, dijo ayer Hayden, de 27 años, un día después de que el tornado sacudiera su hogar mientras ella y Moton, de 31, se protegían acurrucados en la bañera. El baño fue la única habitación que no fue destruida.
La pareja resultó ilesa y las historias de otros sobrevivientes demuestran que el saldo de muertos podría haber sido mucho mayor. Las autoridades intentan evaluar los daños que provocó el mal tiempo y que afectó a media decena de estados del sur del país durante el fin de semana.
Cientos de casas resultaron dañadas por el tornado, que dejó una senda de destrucción desde la frontera con Luisiana al este-centro de Misisipí. Al menos tres decenas de personas resultaron heridas.
Marc McAlister, del Servicio Meteorológico Nacional, dijo que el tornado tuvo vientos de 257 kilómetros por hora (160 millas por hora) y provocó una senda de destrucción de al menos 80 kilómetros (50 millas).
Este tornado fue enorme, dijo el gobernador Haley Barbour.
El condado Choctaw de Misisipí registró el mayor número de muertes confirmadas: cinco, incluyendo un bebé y otros dos niños.
Las autoridades no han emitido una lista con los muertos.