Caracas. EFE, AP La empresa venezolana Siderúrgica del Turbio S. A. (Sidetur), cuya expropiación ordenó el domingo el presidente Hugo Chávez, indicó ayer que ejercerá acciones legales contra la medida para defender sus intereses.
“Sidetur ejercerá las acciones legales destinadas a resguardar los derechos e intereses de sus trabajadores, clientes, proveedores y accionistas en el contexto del proceso de expropiación anunciado por el Ejecutivo Nacional” , señaló el comunicado de la empresa.
Esas acciones se justifican, según el comunicado, porque no hay razones objetivas que argumenten la expropiación de Sidetur.
Chávez ordenó el embargo de la empresa durante su programa dominical de televisión ¡Aló Presidente!, al alegar que la compañía vende sus productos a precios demasiado elevados en el mercado interno.
En ese sentido, la compañía manifestó que ha cumplido estrictamente con la regulación de precios decretada por el Ejecutivo nacional y que los mantiene congelados desde el 6 de diciembre del 2006, aun cuando la inflación acumulada desde esa fecha es cercana al 100%.
Por otra parte, Chávez ordenó a la Guardia Nacional que se instalara de inmediato en las plantas expropiadas para resguardar sus instalaciones y evitar obstáculos a la decisión oficial.
El mandatario exhortó a los empleados de la empresa a que colaboren con el Gobierno en lugar de que protesten por la expropiación.
La nota de Sidetur precisa que cualquier medida de ocupación previa a sus instalaciones debe ser acordada por un juez competente y precedida del pago establecido por una Comisión de Avalúos imparcial, tal como lo ordena la Ley de Expropiación .
Previamente a estos anuncios, Sidetur recordó en el comunicado que tiene más de 60 años de actividad como proveedora del mercado nacional de productos siderúrgicos para la construcción.
Añadió que sostiene 1.857 empleos directos y más de 5.000 indirectos y que en 2009 colocó en el mercado nacional 350.000 toneladas de cabillas (barras de acero), suficientes como para levantar 160.000 viviendas.
Sidetur exhortó al Gobierno a evaluar el impacto que esta medida tiene sobre los planes de infraestructura y construcción a nivel nacional, así como sobre los trabajadores y sus familias, proveedores y clientes de la empresa.
A mediados del 2008, Chávez nacionalizó Sidor, la más grande acería del área andina y del Caribe, cuya mayoría accionaria pertenecía al conglomerado argentino Techint. Desde entonces ha continuado estatizando compañías de este sector, como la argentina Matesi u otras de capital venezolano.