Managua. AP. El presidente de la Asamblea Nacional, René Núñez, desconoció ayer la resolución con la que diputados opositores buscaban anular un decreto del presidente Daniel Ortega que prorroga en sus cargos a dos magistrados de la Corte Suprema de Justicia.
“El Frente Sandinista nunca ha aceptado como legal la reunión del Holiday Inn”, dijo el diputado sandinista aludiendo al encuentro del martes en un hotel capitalino por la oposición y en el que se supone que 48 diputados aprobaron la resolución que anula el decreto del mandatario Ortega.
La sesión legislativa se llevó al hotel, debido a que una turba de simpatizantes del partido gobernante Frente Sandinista de Liberación Nacional bloqueó el ingreso a la sede del Poder Legislativo, al día siguiente persiguió a políticos y periodistas, destruyó varios vehículos y atacó con piedras y morteros el cuartel de una partido opositor.
El jueves, los protestantes nuevamente se reunieron frente a la Asamblea Nacional y destrozaron algunos ventanales.
Los partidarios del Gobierno buscaban impedir que la oposición anulara el decreto presidencial que mantiene en su cargo a dos magistrados afines al sandinismo y cuya permanencia, así como la de otros funcionarios cuyos cargos están por vencer, serían cruciales si Ortega decide postularse para un segundo mandato consecutivo.
Entre tanto, ayer la Conferencia Episcopal de Nicaragua expresó su preocupación por la crisis y pidió un pacto social por el bien del país.
“El momento crítico que se vive solo es superable por un diálogo transparente entre las fuerzas políticas y sociedad civil, que conlleve a un consenso y un nuevo pacto social que asegure estabilidad”, indicaron los obispos en una carta.