Presidenta de CNE rechaza responsabilidad sobre trocha

Este artículo es exclusivo para suscriptores (3)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.

Subscribe

Ingrese a su cuenta para continuar disfrutando de nuestro contenido


Este artículo es exclusivo para suscriptores (2)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.

Subscribe

Este artículo es exclusivo para suscriptores (1)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.

Subscribe

La presidenta de la Comisión Nacional de Emergencias (CNE), Vanessa Rosales, rechazó ayer ante los diputados de la Comisión Legislativa de Ingreso y Gasto Público su responsabilidad de supervisar y fiscalizar los dineros usados para construir la trocha fronteriza.

La jerarca afirmó que el control presupuestario era “responsabilidad” del Consejo Nacional de Vialidad (Conavi) y la fiscalización le correspondía a la Contraloría General de la República.

“El Conavi inició la construcción de la ruta desde finales del 2010 con recursos propios, mucho antes de que el Poder Ejecutivo promulgara el decreto de emergencia, en marzo del 2011”, dijo.

Agregó que al amparo del decreto, los recursos del Fondo Nacional de Emergencias utilizados para la construcción de la ruta fueron ¢2.522 millones, ya que el 87% de las obras se ejecutó con presupuesto del Conavi.

Según la jerarca, ante los presuntos hechos de corrupción cometidos por los funcionarios de Conavi, la Junta de la CNE dictó instrucciones de que temporalmente no se pueda continuar con giros contra la cuenta especial en Caja Única.

“(La CNE) está en la mejor disposición de que los ¢16.000 millones se mantengan en esa cuenta y se utilicen para continuar con las obras, apegados a los alcances del convenio suscrito”, dijo Rosales.

Paul Zúñiga, asesor legal de la Junta Directiva de la CNE, defendió el accionar de la institución. Alegó que la Procuraduría General de la República ya había avalado la donación, por lo que “amparados a la ley” no les correspondía hacer la fiscalización.

Críticas. El diputado del Partido Unidad Social Cristiana (PUSC), Luis Fishman, dijo que “la CNE quiere lavarse las manos” y dijo que dicha entidad es la responsable de darle seguimiento a cómo se utilizan los recursos cuando se da una declaratoria de emergencia.

Planteó que Rosales debe volver a la Comisión porque, tras dos horas de comparecencia, dejó dudas.

Manrique Oviedo, diputado del Partido Acción Ciudadana, dijo que la CNE no puede evadir que tenía el control de esos recursos y que debe ser responsable.

Alicia Fournier, del Partido Liberación Nacional, manifestó que la comparecencia dejó “todo muy bien explicado”.