Washington
¿Terrorismo interno, homofobia o episodio aislado de un fanático bien armado?
Más de 48 horas después de la matanza en una discoteca gay en Orlando, Florida, que costó la vida a 50 personas (incluido el atacante) y causó heridas a 53, las autoridades tienen en sus manos varias hipótesis e interrogantes que deben despejar para determinar la causa del peor tiroteo en la historia de Estados Unidos.
El presidente Barack Obama dijo el martes que el ataque fue obra de un joven "perturbado e inestable que se radicalizó" por influencia de la propaganda del islam radical y los investigadores privilegian la pista de un "lobo solitario" impulsado por motivaciones radicales islamistas para explicar las motivaciones del agresor, en cuyo complejo pasado hay muchas sombras.
El mandatario advirtió de que cuesta entender qué llevo a un individuo "trastornado" a actuar así y planteó que quizá sea más importante realizar un profundo análisis de lo que hay que hacer frente a este tipo de episodios.
"Sabemos que en algún momento, entre los 300 millones (de habitantes de Estados Unidos) va a haber algunos individuos que, por cualquier razón, encuentran tentador ese tipo de propaganda", afirmó Obama el lunes. "Y si eso pasa, y esa persona puede conseguir un arma, eso constituye un problema".
O sea, el presidente admitió que ataques como el de Orlando pueden ser hoy un nuevo componente en la vida de Estados Unidos.
El martes, después de una reunión con sus asesores de seguridad, el gobernante expresó su solidaridad cdon los supervivientes y los familiares de los muertos, así como con la comunidad de lesbianas, gais, bisexuales y transgéneros (LGTB) "que fue atacada"
¿Atacante solitario? Reiteró la afirmación que el pistolero, Omar Mateen, estadounidense de ascendencia afgana, actuó solo, sin recibir órdenes del Estado Islámico (EI), aunque inspirado por la propaganda en Internet de los yihadistas. El EI, según una agencia de noticias próxima al grupo terrorista, se responsabilizó por la matanza.
El ataque en Orlando ocurrió en momentos cuando la Casa Blanca ha pregonado progresos en la lucha contra el Estado Islámico en Siria e Irak, uno de los grupos yihadistas con los cuales Omar Mateen manifestó simpatías.
Empero, los golpes a los reductos del EI parecen evidenciar que no disminuye el riesgo de acciones terroristas dentro de Estados Unidos, sobre todo las perpetradas por los propios estadounidenses o gente que actúa por su propia cuenta.
"El Estado Islámico trata de demostrar que todavía tiene poder y una forma d ehacerlo es por medio de estos atacantes solitarios, porque no tienen que venir de Siria, Irak o Libia", destacó Wendy Sherman, quien fue subsecretaria de Estado durante la administración de Obama.
La Oficina Federal de Investigaciones (FBI) investigó entre el 2013 y el 2014 a Mateen, que manifestó su lealtad al EI durante el ataque, "por eventuales vínculos con terroristas", pero esas pesquisas fueron archivadas por falta de pruebas.
¿Odio a los homosexuales? Otra posibilidad que los investigadores tienen en la mira es que el tiroteo en Orlando haya obedecido a una reacción de odio de Mateen a los homosexuales.
El propio día de la tragedia, el padre del atacante, Mir Seddique Mateen, apuntó a la homofobia como la razón de la violenta actuación de su hijo. Afirmó que este se enfadó mucho cuando, dos meses atrás, observó a dos hombres besándose en Miami, enfrente de su hijo y esposa.
El FBI está investigando versiones de que el pistolero frecuentaba el club gay donde atacó y que usaba aplicaciones (apps) para conseguir citas con otros hombres, dijo una fuente oficial.
Clientes frecuentes de la discoteca Pulse, escenario de la tragedia, afirmaron haber visto allí varias veces a Mateen, musulmán de 29 años. Agregaron que lo vieron utilizar apps para conseguir gais.
Según Jim Van Horn, de 71 años, el autor de la masacre era un habitué del club. "Venía a tratar de conseguir pareja. Hombres", aseveró a la agencia de noticias Associated Press (AP), el lunes en la noche, frente a Parliament House, otro club gay.
"Me parece posible que estuviera luchando contra sus propios demonios, tratando de despojarse de su furia hacia la homosexualidad", declaró Van Horn, quien perdió a ters amigos en la matanza.
La fuente oficial, que no fue identificada pues no tenía autorización para hablar del asunto en público, reiteró que el FBI indaga esas versiones.
Una de estas la suministró Ty Smith al diario Orlando Sentinel. "A veces se quedaba a un lado y bebía solo, y otras veces estaba tan ebrio que se volvía escandaloso y agresivo", comentó. Dijo que vio allí a Mateen por lo menos una docena de veces.