Seúl suspende su propaganda en la frontera antes de la cumbre intercoreana

Reunión entre líderes del Norte y Sur está prevista para el viernes 27 de abril

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Seúl. Seúl acalló este lunes los enormes altoparlantes que emiten mensajes propagandísticos a los soldados norcoreanos desplegados en la frontera, un gesto de reconciliación antes de la cumbre norte-sur del viernes.

“Desde hoy hemos suspendido los anuncios por altavoces con el propósito de reducir las tensiones y crear un clima de paz (...) antes de la cumbre intercoreana”, indicó en un comunicado el ministerio de Defensa

Corea del Norte había anunciado el fin de semana la suspensión de su programa de ensayos nucleares y de lanzamientos de misiles balísticos intercontinentales, iniciativas que Seúl consideró como un fuerte gesto de distensión.

“Es una decisión importante en vías de la desnuclearización total de la península coreana”, dijo el presidente surcoreano Moon Jae-in, antes que su gobierno replicara acallando los altoparlantes de propaganda.

Pese a los gestos de distensión entre ambas, Coreas Donald Trump mantiene su escepticismo sobre las intenciones del régimen de Pionyang.

“El camino es largo (...) El futuro dirá”, escribió el domingo en Twitter el presidente estadounidense, quien debería mantener un encuentro histórico con el líder norcoreano Kim Jong Un en las próximas semanas.

Desde hacía tiempo las fuerzas militares surcoreanas difundían mediante gigantescos altavoces mensajes grabados de propaganda exhortando a los soldados norcoreanos a desertar, entremezclados con música y noticias con enfoque surcoreano.

Al otro lado de la ultrafortificada “zona desmilitarizada”, Corea del Norte dispone de sus propios equipos de sonido encargados de difundir su propaganda hacia el Sur.

Las dos Coreas están aún técnicamente en guerra, ya que el conflicto se detuvo con un armisticio hace 65 años sin que jamás se firmara un tratado de paz.

Decenas de miles de soldados de ambos países permanecen desplegados a ambos lados de la zona desmilitarizada, repleta de miradores, posiciones de artillería y zonas minadas.

Arsenal nuclear

Desde la óptica de Seúl, el eje de la reunión del viernes, luego del anuncio de la suspensión de ensayos norcoreanos, será si Kim promete pasos concretos para desmantelar su arsenal nuclear.

El líder norcoreano ha asistido a cuatro de los seis ensayos nucleares de su país, además de a decenas de lanzamientos de misiles, entre ellos especialmente los ICBM (misiles balísticos intercontinentales), capaces, en teoría, de alcanzar territorio continental de Estados Unidos.

Pero nada se ha dicho sobre el eventual desmantelamiento del arsenal nuclear.

“Todas las decisiones anunciadas por Kim son reversibles, de palabras y promesas en el aire. Y Corea del Norte no tiene reputación de cumplir sus promesas”, afirmó Harry Kazianis, especialista en temas de defensa del grupo de estudios conservador Center for the National Interest, en Washington.

Kazianis advierte que Kim Jong Un podría rápidamente relanzar sus programas de misiles y nucleares si no obtiene lo que quiere en sus reuniones con el surcoreano Moon y con Trump. “La comunidad internacional debe mantener esperanzas, pero no debe ser estúpida”, dijo a la AFP.

Desde el sorpresivo anuncio el 1 de enero de una participación norcoreana en los Juegos Olímpicos de invierno de Pieonchang, el Norte y el Sur han multiplicado los gestos mutuos de buena voluntad luego de años de tensión.

Esta mejora de relaciones alcanzará un nuevo hito el viernes con el anunciado encuentro entre los líderes de ambas Coreas, previsto en el sur de la zona desmilitarizada que marca la frontera bilateral.