Sanciones de Estados Unidos a Rusia causan malestar a aliados europeos

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Washington

Washington prometió el sábado que "trabajará estrechamente" con sus "amigos y aliados" después de que los legisladores estadounidenses aprobaron sanciones contra Rusia que molestaron a algunas naciones europeas al temer que puedan afectar sus negocios.

El Congreso aprobó el jueves un paquete bipartidista de sanciones que apunta a Rusia, Irán y Corea del Norte, en un proyecto de ley que el presidente Donald Trump acordó firmar.

La medida tiene como objetivo penalizar a Moscú por entrometerse en las elecciones presidenciales estadounidenses de 2016 y por la anexión de Crimea.

LEA: Presidente Trump promulgará la ley con nuevas sanciones contra Rusia

Pero ha causado cierta consternación en las capitales europeas, que están acostumbradas a coordinar medidas contra Rusia a ambos lados del Atlántico, en un frente occidental común que recuerda a la Guerra Fría.

La Unión Europea (UE) ha expresado su preocupación porque las medidas penalicen injustamente a las empresas europeas que contribuyen al desarrollo del sector energético de Rusia, y sus diplomáticos han presionado fuertemente a Washington para que las reduzca.

París había calificado el proyecto de ley estadounidense de "ilegal" en el derecho internacional, mientras que Berlín había advertido que sus negocios, en particular un polémico proyecto de gasoducto entre Rusia y Alemania, no debían ser afectados.

El secretario de Estado estadounidense, Rex Tillerson, trató de calmar esas preocupaciones el sábado con un comunicado.

"Los casi unánimes votos por la ley de sanciones en el Congreso representan la fuerte voluntad del pueblo estadounidense de ver a Rusia tomar medidas para mejorar las relaciones con Estados Unidos", señaló Tillerson.

"Trabajaremos estrechamente con nuestros amigos y aliados para asegurar que nuestros mensajes a Rusia, Irán y Corea del Norte sean claramente entendidos", agregó.

Descontento de Irán

Por su parte, Irán condenó este sábado las nuevas sanciones adoptadas por el Congreso estadounidense, afirmando que proseguirá "con todas sus fuerzas" con su programa balístico.

En el frente político, el portavoz del ministerio de Relaciones Exteriores, Bahram Ghasemi, dijo que Teherán condenaba las nuevas sanciones estadounidenses contra su programa de misiles.

"Nuestra política en el ámbito militar y balístico es muy clara y es un tema de asuntos internos. Los otros países no tienen el derecho de interferir", añadió Ghasemi.

"Condenamos la acción hostil e inaceptable" de Estados Unidos, añadió refiriéndose a las nuevas sanciones votadas por el Congreso y pendientes de la firma del presidente Donald Trump.

En el caso de Irán, estas sanciones afectan a su programa balístico, los derechos humanos y el apoyo de Teherán a grupos como el Hezbolá libanés, clasificados por Estados Unidos como "terroristas".

Ghasemi consideró que las sanciones "están encaminadas a debilitar el acuerdo nuclear" concluido en 2015 entre Irán, Estados Unidos, China, Rusia, Francia, Reino Unido y Alemania.

Estados Unidos y sus aliados europeos alzaron el tono el viernes contra Irán, instando a su gobierno a cesar sus disparos de misiles balísticos, un día después de que Teherán hubiera probado un lanzador de satélites.

Para Estados Unidos y sus aliados europeos, el programa balístico "sigue siendo contradictorio con la resolución votada en 2015 tras el acuerdo nuclear y tiene un impacto desestabilizador en la región".