San Salvador
El Salvador aguarda respuestas de Honduras a la protesta presentada luego que militares de ese país izaron la bandera en una diminuta isla en el golfo de Fonseca reclamada como salvadoreña, informó este lunes el presidente Mauricio Funes.
"Dependiendo de la respuesta que tengamos del Gobierno de Honduras, así veremos si procede mantener una reunión bilateral con el presidente (Porfirio) Lobo para que este tipo de situaciones no creen una situación de inestabilidad en la región del golfo", declaró Funes en rueda de prensa.
El mandatario descartó tomar otras medidas. "No vamos a marcar presencia militar en la zona, porque nos hemos comprometido a hacer de la zona del Golfo de Fonseca una zona de paz", aseguró.
San Salvador remitió la nota de protesta a Tegucigalpa luego de que miembros del Ejército hondureño entregaron una bandera de esa nación al militar que está "al mando de la ocupación de facto" de isla Conejo, de menos de un kilómetro cuadrado de extensión, como parte de la conmemoración de la independencia, que se celebrará este próximo 15 de setiembre.
En una "valoración personal", Funes recordó que en noviembre se realizarán elecciones presidenciales en Honduras, lo que provoca que los partidos busquen "exaltar el sentimiento de nacionalismo" para "agenciarse un caudal de votos mayor".
El Salvador ha reclamado a Honduras la pertenencia de la isla Conejo, ubicada en el golfo de Fonseca. Aunque se había definido que las dos naciones harían una rotación de vigilancia para evitar que ingresaran armas a tierra, tras la guerra civil salvadoreña (1980-1992). Pero luego de la última rotación, Honduras se quedó en la isla.
El 11 de setiembre de 1992, la Corte Internacional de Justicia (CIJ) de La Haya dirimió un litigio territorial e insular y, de 447 Km2 en disputa, asignó a Honduras 312 km2. Según la Cancillería salvadoreña, la Corte "en ningún momento se cuestionó la soberanía de El Salvador sobre la isla Conejo, ni la pertenencia de esta al territorio salvadoreño".
El Salvador, Honduras y Nicaragua se reparten 32 islas ubicadas en el golfo de Fonseca, pero en la sentencia de 1992 la CIJ solo se pronunció respecto de la Isla del Tigre, que concedió a Honduras, y de Meanguera y Meanguerita, cuya soberanía ratificó para El Salvador.