Pescadores temen por futuro tras marea negra

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Grand Isle, EE. UU. AFP. Seis meses después de la explosión de una plataforma petrolera en el golfo de México que provocó una marea negra en el sur de Estados Unidos, los pescadores de la región temen que las ayudas prometidas se evaporen.

Durante los tres meses en los que el petróleo tiñó las costas del golfo de México, pescadores y cultivadores de ostras fueron protagonistas de la escena mediática.

El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, viajó varias veces a la zona para asesorarse sobre la suerte de los habitantes cuyo principal recurso es la pesca.

Pero, seis meses más tarde, el tema ya no marca la agenda de los medios de comunicación estadounidenses. Son varios los pescadores que dicen estar a la espera de recibir las compensaciones del fondo de indemnizaciones, de $20.000 millones, otorgado por la empresa británica British Petroleum (BP), que administra la plataforma que explotó el 20 de abril.

Según Byron Encalade, presidente de la asociación de cultivadores de ostras y de una cooperativa de pesca, 20% de los trabajadores aún esperan su indemnización.

“A los cultivadores de ostras se les murió el 100% de los reservas. No tienen nada”, explicó Encalade

El 70% de las aguas del Golfo, cerradas en el momento de la catástrofe, continúan siendo zona prohibida para la pesca.

Según Jonathan Henderson, miembro de la Asociación para la Preservación del Golfo de México, aún hay petróleo en el agua.

Tras la explosión de la plataforma Deepwater Horizon , 11 operarios murieron y derramó 780 millones de litros de crudo.