Washington. AFP. Un juez federal estadounidense condenó a un exfuncionario del Departamento de Estado, Walter Kendall Myers, a cadena perpetua y a su esposa a 81 meses de cárcel por haber espiado 30 años a favor de Cuba, informó ayer el Departamento de Justicia.
Walter Kendall Myers, de 73 años, y su esposa Gwendolyn, de 72, fueron detenidos en junio del 2009 y meses después se declararon culpables ante la justicia de haber suministrado material de alto secreto a Cuba, señaló el comunicado del Departamento de Justicia.
Myers, conocido como Agente 202 inició su carrera en el Departamento de Estado a partir de 1977. Su cadena perpetua es sin posibilidad de remisión. La pareja deberá pagar una multa de $1,73 millones.
Myers empezó a espiar para Cuba unos seis meses después de un viaje a la isla en diciembre de 1978, según confesó la pareja. Los esposos filtraban información a agentes del régimen comunista mediante el intercambio de carritos de la compra en supermercados.
En 1985, Myers obtuvo acceso a información clasificada y tres años luego pasó a la sección de inteligencia e investigación del Departamento de Estado. Su nivel de acceso a datos sensibles creció en 1999.