Papa Francisco condena globalización de la indiferencia ante drama de la inmigración

Es la primera visita de un Papa a la isla italiana, célebre por recibir cada año a miles de inmigrantes ilegales

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Lampedusa

El papa Francisco condenó con firmeza este lunes en la isla siciliana de Lampedusa, en el sur de Italia, la "globalización de la indiferencia" ante el drama de la inmigración ilegal.

"La ilusión por lo insignificante, por lo provisional, nos lleva hacia la indiferencia hacia los otros, nos lleva a la globalización de la indiferencia", advirtió el Papa en su primer viaje oficial dentro de Italia.

"Hemos perdido el sentido de la responsabilidad fraternal", clamó durante la misa que ofició en el pequeño estadio de la isla, puerta de entrada a Europa de miles de indocumentados que sueñan una vida mejor.

"La cultura del bienestar nos vuelve insensibles a los gritos de los demás, nos hace vivir en una burbuja de jabón: bella, pero vacía", dijo.

"Señor, con esta liturgia, que es una liturgia de penitencia, pedimos perdón por la indiferencia de hermanos y hermanas, pedimos perdón por habernos acomodado, por habernos encerrado en nuestro bienestar que anestesia el corazón", dijo.

En su homilía, en un altar instalado sobre una barca, ante cientos de inmigrantes e isleños, el Papa condenó también "el tráfico de personas que explotan la pobreza", dijo.

Es la primera visita de un Papa a la isla italiana, tristemente célebre en el mundo por recibir cada año a miles de inmigrantes ilegales que atraviesan el mar en pateras de fortuna, ha sido organizada en uno de los meses en que el fenómeno se intensifica debido a las buenas condiciones del mar.

Se calcula que en los últimos 20 años han perdido la vida 25.000 inmigrantes que trataban de llegar a Europa en pateras, botes o cayucos. Según datos del Alto Comisionado de la ONU para los Refugiados (Acnur), unos 40 emigrantes murieron ahogados en el año 2013.