Ciudad del Vaticano (AFP). El papa Francisco instó a la Iglesia católica a no ceder "nunca al pesimismo", en un encuentro el viernes en el Vaticano con todos los cardenales, a los que invitó a buscar "nuevos métodos" para llevar los Evangelios a "todos los extremos de la Tierra".
"No cedamos nunca al pesimismo ni a la amargura que el diablo nos ofrece cada día", declaró el nuevo pontífice latinoamericano en la Sala Clementina, leyendo un discurso emotivo y lleno de agradecimientos que se saltó en numerosas ocasiones para introducir reflexiones personales.
Francisco invitó a los "príncipes de la Iglesia", a "buscar nuevos métodos de evangelización para llevar la verdad cristiana (...) a todos los extremos de la Tierra".
Improvisando, agregó en forma desenfadada ante la mirada sorprendida de algunos cardenales, "la mitad de nosotros estamos en la vejez", "donemos la sabiduría a los jóvenes, para que como el buen vino con los años mejore".
El papa, vestido con una sencilla sotana blanca y una cruz de hierro, invitó improvisando a los cardenales a sentirse con él "una comunidad de amigos". "Somos todos hermanos, eso nos hace bien a todos", dijo.
Francisco rindió homenaje a su predecesor Benedicto XVI calificando su casi inédita renuncia al pontificado como un "gesto valiente y humilde".
"Dedico un pensamiento lleno de afecto y profunda gratitud" a Benedicto XVI, quien fue un intérpetre "humilde y paciente" de su ministerio, "un patrimonio espiritual para todos", agregó.