Obama defiende gobierno sacudido por escándalos

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Washington. AFP. El presidente estadounidense, Barack Obama, defendió ayer a su gobierno, envuelto en varios escándalos en los últimos días, que han sido aprovechados por la oposición republicana para arremeter contra la Casa Blanca.

En una rueda de prensa tras reunirse con el primer ministro turco, Recep Tayyip Erdogan, Obama procuró apagar los fuegos que han puesto a su administración en una situación complicada y han llevado a los republicanos a acusar a la Casa Blanca de abuso de poder.

El presidente aseguró no haber tenido conocimiento sobre los abusos por parte de funcionarios del organismo impositivo contra grupos conservadores hasta que el informe sobre el caso se filtró a la prensa la semana pasada.

En una primera medida para disminuir la polémica, Obama había anunciado el miércoles el despido del jefe de la agencia fiscal estadounidense debido a la investigación que esa oficina hizo a grupos conservadores.

El escándalo estalló cuando se supo que los funcionarios que controlaban las aplicaciones de la exención fiscal se centraron en grupos conservadores señalados con nombres o frases como “Tea Party” o “Patriotas”, vinculados al Partido Republicano,.

El mandatario dijo que los abusos revelados eran “inaceptables” y prometió castigar a todos los que hayan estado involucrados.

Obama también se refirió a las polémicas escuchas a periodistas, al advertir que las filtraciones sobre seguridad nacional pueden costar vidas, en una defensa de la investigación de su administración para identificar a quienes revelaron información secreta.

Empero, aceptó que es importante hacer un balance entre seguridad y la libertad de expresión en una alusión a las críticas desencadenadas por la intervención de los archivos de llamadas telefónicas de la agencia de prensa Associated Press (AP) por parte del departamento de Justicia.

“Filtraciones sobre seguridad nacional pueden poner gente en peligro”, insistió Obama.

“No me disculpo y no creo que el pueblo estadounidense espere que, como comandante en jefe, no me preocupe por la información que pueda poner en peligro sus misiones o ponga en peligro sus vidas”, puntualizó el gobernante.