Marruecos mantiene cerco militar contra saharauis

Afectados denuncian detenciones masivas y desapariciones

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Rabat. EFE. Los disturbios que el lunes asolaron la capital del Sahara Occidental dieron paso ayer a una aparente normalidad en las calles de El Aaiún, pero fuentes saharauis señalaron que hay detenciones masivas en los barrios orientales, de mayoría saharaui, y al norte de la ciudad.

Testigos aseveraron que militares y fuerzas de seguridad continúan desplegados por las principales calles de la ciudad, mientras que un buen número de comercios y cafeterías optaron por cerrar puertas.

El paisaje después de la batalla campal del lunes mostraba los graves daños sufridos en la sede de la televisión de El Aaiún, asaltada e incendiada por manifestantes saharauis, así como en otros edificios públicos, bancos y algunos negocios particulares.

Tranquilidad relativa. El epicentro de los disturbios, la avenida Smara, se veía ayer relativamente tranquila, pero resultaba difícil verificar hasta qué punto esa normalidad era solo aparente ya que, por tercer día, Marruecos bloqueó el acceso a El Aaiún a los periodistas internacionales, por lo que todos los testimonios se obtienen por vía telefónica.

La aerolínea de bandera marroquí Royal Air Maroc dejó en tierra a 13 corresponsales y enviados de distintos medios -la mayoría españoles- que acudían a la ciudad para informar sobre los incidentes, los más graves en El Aaiún en casi dos décadas.

La ministra de Asuntos Exteriores de España, Trinidad Jiménez, pidió a Marruecos que permita a la prensa trabajar de manera “transparente”.

España, que debió descolonizar el Sahara Occidental en 1975 y, en su lugar, entregó la administración a Marruecos, se niega a asumir un papel mayor en el conflicto y argumenta que es un problema internacional.

Fuentes saharauis dijeron que la Policía detuvo a un gran número de jóvenes supuestamente implicados en los disturbios, aunque Rabat hasta el momento solo ha dado a conocer 65 arrestados.

Esas mismas fuentes explicaron que las fuerzas de seguridad quemaron árboles y neumáticos a las orillas de Saguia el Hamra, al norte de El Aaiún, para obligar a salir a muchos jóvenes que se han escondido allí, y entre los cuales puede haber algunos heridos.

Frente a esta versión, el prefecto de la Policía de El Aaiún, Mohamed Djisi, aseguró que la situación de la ciudad era “estable y normal” y que había recobrado el pulso habitual.

Por el momento, Marruecos ha reconocido oficialmente nueve víctimas mortales, ocho de las cuales son efectivos de sus cuerpos de seguridad y uno es un civil saharaui.

Mientras, el independentista Frente Polisario dio cuenta de 11 muertos, 723 heridos y 159 desaparecidos durante el asalto marroquí al campamento Gdaim Izik, levantado en octubre por miles de saharauis para reclamar derechos socioeconómicos.

El ataque se produjo horas antes de que en Nueva York se iniciara una reunión entre delegados marroquíes y del Polisario, auspiciada por la ONU, para tratar de encontrar una solución al atascado conflicto en el norte de África.