Maltrato a inmigrantes continúa en EE. UU.

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Washington. AFP El gobierno de Barack Obama mejoró el trato a los inmigrantes ilegales en Estados Unidos, pero no lo suficiente, y estos siguen siendo víctimas de vejaciones, afirmó ayer la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) en un informe.

El extenso informe de la CIDH, realizado luego de visitas a seis centros de detención de migrantes y entrevistas con funcionarios, expertos, detenidos y familiares, da cuenta de condiciones precarias de inmigrantes detenidos, falta de acceso a abogados y capturas discriminatorias basadas en la raza.

“Hemos visto una cierta evolución con respecto al tratamiento de migrantes bajo la actual Administración, pero nos parece que es todavía claramente insuficiente”, dijo en teleconferencia el presidente de la CIDH, Felipe González.

“EE.UU. tiene el patrón de someter a detención a los inmigrantes sin documentos, lo cual debería ser una excepción en casos de estricta necesidad, y las personas reciben un trato como si estuvieran imputadas por delitos penales cuando en realidad no se trata de esa situación”, afirmó González.

La CIDH considera “preocupante la ausencia de un sistema de detención civil, con las condiciones generales compatibles con la dignidad y el trato humano”.

Obama ha ratificado que su política es la de enfocarse en la detención y deportación de indocumentados que representen un peligro para la sociedad, lo que le ha valido críticas de la oposición que considera que es laxo en el cumplimiento de las normas migratorias.

Casi once millones de inmigrantes ilegales viven en el país.

El gobierno de Obama facilitó las visitas a los centros de detenciones, que fueron obstaculizadas por su antecesor George W. Bush, reconoció la CIDH. “Hemos visto cierto cambio”, dijo González.