Trípoli AP Seif al-Islam, hijo de Muammar Gadafi y el único miembro de la familia que seguía prófugo, fue capturado mientras viajaba con asesores en el desierto del sur de Libia.
El hombre de 39 años, al que la Corte Penal Internacional (CPI) le impuso cargos contra la humanidad, fue detenido a unos 50 kilómetros del poblado de Obari mientras intentaba huir al vecino Níger, informó un portavoz de los combatientes libios que lo capturaron.
La captura de Seif al-Islam se produjo apenas un mes después de la muerte de su padre.
La televisión libia difundió una fotografía en la que presuntamente aparece Seif al-Islam bajo custodia, sentado sobre una cama y con tres dedos vendados mientras un guardia lo vigila. Los grupos internacionales por la defensa de los derechos humanos exhortaron a los libios a respetar sus derechos.
“Seif debe enfrentar a la justicia. Ya sea en Libia o en La Haya, debería enfrentar a la justicia. Tenemos que coordinar con las autoridades libias”, afirmó Luis Moreno Ocampo, fiscal de la CPI, desde La Haya en una entrevista telefónica.
Tras la captura, varios países han solicitado insistentemente a los dirigentes del nuevo régimen libio un juicio justo para al-Islam.
Marek Marczynski, de Amnistía Internacional, instó a los libios a transferir a Seif al-Islam a la sede de la CPI en Holanda lo antes posible. “La CPI tiene una orden de arresto en su contra y eso es lo que debe hacerse. Debe ser presentado ante un juez en cuanto se pueda”, señaló.