San Sebastián, España. AFP La izquierda independentista vasca apoya “todas” las propuestas de la Conferencia Internacional de Paz, incluida la que pide a la banda armada ETA el fin de la violencia.
En momentos en que varios actores del proceso hablan de un inminente anuncio de ETA sobre el fin de la violencia, la izquierda independentista expresó su confianza en que la organización y los Gobiernos español y francés “respondan de forma positiva”.
“La Izquierda Abertzale (IA, independentista vasca) manifiesta su apoyo a todas y cada una de las conclusiones emanadas de la Conferencia Internacional” que se celebró el lunes en San Sebastián, anunció uno de sus dirigentes, Rufi Etxeberria, en rueda de prensa.
Considerada una organización terrorista por la Unión Europea y Estados Unidos, ETA es responsable de la muerte de 829 personas en más de 40 años de atentados por la independencia del País Vasco.
Muy debilitada por los duros golpes policiales, lleva desde agosto de 2009 sin cometer atentados en territorio español.
El 10 de enero anunció un alto al fuego permanente, general y verificable por la comunidad internacional; sin embargo, no ha mencionado una entrega de armas o su disolución total.
Etxeberria manifestó que el movimiento independentista considera que se sientan así las bases para establecer una resolución del conflicto vasco. Agregó: “Debe contar con la participación de todas las culturas y proyectos políticos del País Vasco, y también el nuestro, el independentista”.
También, hizo un llamado a cooperar a todas las fuerzas políticas del país, incluidas las que no participaron en la Conferencia de Paz, la principal de las cuales fue el Partido Popular (PP, derecha), que parte como gran favorito para las elecciones legislativas del 20 de noviembre en España.
No convencidos. Pese a la presencia de personalidades extranjeras de renombre, la Conferencia de la Paz, en la que no participó el Gobierno español, no dio el paso que algunos esperaban: pedir la disolución de ETA.
“Esperábamos un poco más de esta conferencia. Que le pidieran a ETA el cese definitivo de toda actividad armada, es normal”, remarcó el periodista Gorka Landáburu, director de la revista Cambio 16 .
Otros critican una “puesta en escena” que abre la puerta a contrapartidas políticas que ni el Gobierno español ni el regional vasco quieren conceder.
“Era previsible, el objetivo de ETA y Batasuna (su brazo político, prohibido en España) era siempre una conferencia internacional para presionar en la línea de la negociación política”, manifestó Florencio Domínguez, quien se desempeña como redactor jefe de la agencia de noticias Vasco Press .