Italia se soca la faja en su gasto público

Reducciones en salud, educación, sector público y poder judicial

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Roma. AFP y EFE. El gobierno italiano de Mario Monti adoptó ayer medidas que permitirán reducir el gasto público de Italia en 4.500 millones de euros a partir del 2012 y en más de 10.000 millones de euros tanto en el 2013 como en 2014.

“Las economías que permitirá el decreto serán de 4.500 millones en 2012, 10.500 millones en 2013 y 11.000 millones en 2014”, declaró Monti públicamente.

A fines de abril, el Gobierno de Italia ya había adoptado un decreto alertando de una meta de reducción de gastos por 4.200 millones de euros en el 2012. El documento adoptado ayer completa con medidas concretas dicho texto, ampliándolo a los dos años siguientes.

Gran parte de esa reducción del gasto público se refiere a la salud y a la administración pública.

Monti destacó que estas medidas permitirán evitar durante al menos un año un aumento del IVA de 2 puntos, que debía pasar de 21% a 23%. Las autoridades querían evitar este cambio, pues temían que agravase la recesión.

Por otra parte, el gobierno decidió, entre otras medidas, reducir en el 2012 en 200 millones de euros sus subvenciones a universidades e instituciones de investigación, y en 300 millones en años siguientes.

El Gobierno también aprobó una reducción en la estructura de su sistema judicial que acompaña a los recortes en el gasto público.

Se aprobó así un decreto para revisar las circunscripciones judiciales que da vía a una propuesta lanzada el año pasado por el Gobierno de Silvio Berlusconi.

El decreto prevé la reducción o la fusión de 37 tribunales y 38 fiscalías de menor entidad, así como la supresión de todas las 220 “secciones de destacamento” de los tribunales y la redistribución del personal administrativo y los magistrados hoy en esas plazas.

Además, se suprimirán 674 sedes de oficinas de jueces de paz, todo en un decreto que pretende ahorrar 2,89 millones de euros este año; 17,33 millones en el 2013, y 31,36 millones de euros en el 2014.

También se reorganizará la red hospitalaria provincial, recortando 20.000 camas pero sin incluir el cierre de pequeños hospitales de menos de 120 camas.