Bruselas (AP). Los trenes y el transporte público se paralizan en Bélgica durante un día de huelga nacional para protestar contra las medidas de austeridad que, en parte, han sido impuestas por presión de la Unión Europea.
Horas antes de que comience la cumbre de la UE en Bruselas para buscar más empleos y crecimiento, los tres principales sindicatos del país advirtieron que los esfuerzos para dar vigor a la economía europea deben enfocarse en cobrar impuestos a las empresas multinacionales y no en recortar los servicios públicos e imponer una reforma a las pensiones que obligue a las personas a trabajar más tiempo y a recortar los pagos en algunos casos.
Un aeropuerto fue cerrado y la terminal internacional aérea de Bruselas sufrió cancelaciones, retrasos y desvíos.
Los retrasos en el tráfico son limitados dado que muchas personas decidieron trabajar desde casa o se tomaron libre el día.