Tegucigalpa. (AFP y redacción). El asesinato ayer periodista Erick Martínez reavivó la indignación en Honduras, el país más violento del mundo.
El joven de 33 años, quien era portavoz de grupos homosexuales y aspirante a diputado por la izquierda, se une a los otros 18 homicidios de comunicadores en dos años, que todavía están sin investigar.
El diario El Heraldo , en su versión digital, informa de que el joven fue trasladado a la morgue de Tegucigalpa, donde se determinó que fue estrangulado y murió por asfixia.
La Policía encontró al cadáver a eso de las 7 a. m. de hoy.